Carlos Martín-Fuertes

Desde el Tajo

Carlos Martín-Fuertes


A propósito de pabellones deportivos

18/06/2024

Veo y leo con relativa sorpresa que en la zona de La Bastida y de San Bernardo, barrio con un crecimiento natural relativo - pero indudablemente un núcleo de población con todos los derechos como los demás de la ciudad -, que va a construirse un pabellón polideportivo. Y me alegro mucho como toledano, pues todo lo que signifique prosperar, aumentar los servicios e instalaciones, es mejorar la tan cacareada calidad de vida que hoy casi todos tenemos en la boca al expresarnos.
Según parece y como suele suceder en estos casos, el Ayuntamiento cederá suelo municipal para que el colegio concertado 'Mayol', antaño situado en la plaza de Ávila, tenga una instalación deportiva digna. La instalación será utilizada por los estudiantes en horario lectivo y fuera de ese horario podrá ser usada por los vecinos. Como en los demás centros educativos de la ciudad.
Una excelente noticia que permitirá desarrollar con todos los medios la materia de Educación Física y deportiva, y tener instalaciones para desarrollar cierto tipo de competiciones, casi un millar de alumnos, ahí es nada. Y más tarde, por los vecinos que no tendrán que trasladarse necesariamente al centro de la ciudad para realizar algunas de sus actividades preferidas.
Aquí totalmente de acuerdo en todo. Pero ahora, permítanme que dé un salto en el terreno y me desplace al colegio público 'Santa Teresa', centro educativo situado en uno de los barrios modernos de la ciudad, Santa Teresa, con menor población claro que el Mayol, pero también grande y con sus necesidades. Es inmerecido y vergonzante que ostente el farolillo rojo de ser el único colegio público de la ciudad que no dispone de pabellón polideportivo cubierto. Ni siquiera una sala cubierta o 'boina' como tienen los que menos.
Esta es la enésima vez y bien sabe Dios que me gustaría que fuera la última, en que clamo para que este colegio disponga de alguna instalación cubierta y no totalmente al aire libre para practicar la actividad física y dar la asignatura con la seriedad que se merece en el siglo XXI. Recuerdo cómo hace dos décadas o más, un padre que tenía allí a sus hijos dijo al profesorado, «tranquilos que el pabellón está al caer». Y ya ven, el pabellón ni ha caído ni se le espera que caiga. Como Gibraltar y la famosa frase de Franco al respecto.
Me pregunto, ¿a qué espera el director provincial de Educación para arreglar la situación y promover un pabellón polideportivo o instalación digna en el colegio? ¿A qué espera también el consejero de Educación para preocuparse del asunto y remediar esta afrenta y este caso tan sangrante? Me consta que la comunidad educativa del colegio ha aunado fuerzas y lo ha intentado antaño, aunque quizá no con la insistencia necesaria. Espero que pronto podamos dar la noticia de que en el colegio 'Santa Teresa', también va a hacerse algo parecido al del Mayol. «Y para luego es tarde», como se decía en mis tiempos infantiles.