Isabel Díaz Ayuso. El presidente de gobierno le tiene ganas a la presidenta madrileña desde hace mucho tiempo, pero Ayuso es hueso duro de roer. Ayuso le ha humillado dejando al PSOE madrileño para el arrastre, debilitándole frente a Sumar, convirtiéndole en tercera fuerza, y además se ha encontrado con una rival peligrosa cuando los sanchistas, empeñados en hacerse con la plaza madrileña a cualquier precio, encontraron en el novio de Ayuso una buena pieza a abatir.

Pero la presidenta sabe cómo defender a su pareja con uñas y dientes y aunque será un tribunal el que diga la última palabra, el error monumental de Sánchez de utilizar a la fiscalía y filtrar a medios de comunicación el acuerdo de conformidad alcanzado con el abogado de González Amador, ha provocado la imputación del Fiscal General del Estado y se ha librado de ella el líder socialista madrileño Juan Lobato. Porque, al olerse la tostada, acudió a un notario para que levantara acta de los mensajes que había recibido de la jefa de gabinete de Óscar López induciéndole a que esgrimiera en la Asamblea madrileña ese acuerdo. Algo absolutamente ilegal, es obligado mantener en secreto cualquier acuerdo de conformidad al que se llegue, tanto en asuntos penales como fiscales o administrativos.

La situación ha llegado tan lejos, que el juez que lleva la causa ha decidido llamar a declarar al jefe de gabinete de Ayuso y a ocho periodistas que publicaron la información. No es una decisión cualquiera: quien les facilitó la información sobre González Amador y, muy importante, a qué horas, pueden ser imputados los jefes de gabinete de Ayuso y de Óscar y llegar incluso hasta el propio presidente de gobierno, si se demuestra que Sánchez dio instrucciones a Óscar López para que filtrara la información.

Se enfrentarán en tan importante plaza dos contendientes fuertes, que se crecen en el debate y, los dos, con experiencia política.

El punto débil de López es Pedro Sánchez, y es ahí donde va a golpear Ayuso, que, sin mancharse, puede ser demoledora simplemente mencionando la lista de mentiras del Sánchez, sus cesiones al independentismo y a Bildu para mantenerse en el poder, iniciativas contradictorias con las de la UE, o cómo está llevando a su partido a fracasos sucesivos y ser el primer presidente que gobierna sin haber ganado as elecciones. Por no mencionar los casos de corrupción, tan cercanos. Legítimamente, pero a través de pactos indeseables.´

López, al que Sánchez hace recados de difícil cumplimiento, tendrá que fajarse a fondo para vencer a Ayuso. La adversaria es fuerte, no se muerde la lengua. Pero Óscar López es hombre que juega bien sus cartas y el partido, con Sánchez a la cabeza, se volcarán para que se cobre la pieza que hoy más importa al secretario general del PSOE y presidente de gobierno.