Alejandro Bermúdez

Con los pies en el suelo

Alejandro Bermúdez


Absueltos ‘cum laude’

12/07/2024

«Hoy condenará la audiencia a Pablito el tunante, porque no robó bastante para pagar su inocencia…» Esta es, más o menos, una de las muchas sentencias que a lo largo de la historia se ha dedicado a la administración de justicia. Quiero pensar que eso solo pasaba porque eran tiempos no democráticos.  Desgraciadamente hemos vuelto a esos tiempos después de 'la toma' del Tribunal Constitucional por los adláteres de ese personaje que llegó al poder sin ganar las elecciones, valiéndose de las más viles artimañas.
Que España ha dejado de ser un estado democrático lo demuestra el hecho de que se ha sustituido la frase de la condena por la de la absolución. No me parece exagerado decir  que «hoy absuelve el Constitucional a Rosa la concejal, pese a hincharse a trincar… la absuelta es socialista…»
¿Y todavía se preguntan por qué la sociedad camina hacia los extremos a pasos agigantados?  ¿No captan el mensaje que supone la elección como diputados europeos a los miembros del partido 'Se Acabó la Fiesta'? Pues el recado es clarísimo. Cuando un partido que es el equivalente a aquel "Chiquilicuatre" que ganó el concurso para representar a España en Eurovisión, obtiene diputados es que el ambiente está saturado. Es la expresión del hartazgo absoluto de la sociedad de tanta  patraña, de tanta situación que parece sacada del teatro de los disparates, de tanto teatro con el que los listillos viven a costa de la gente seria y trabajadora.
¿Alguien con un mínimo equilibrio mental puede tener confianza en un sistema cuyos jueces se alinean como soldados prusianos detrás del bando, muchas veces 'la banda', de quien los coloca, sobre todo si son socialistas?
La inocencia imperante, incluso en supuestos finos comentaristas políticos, hizo que algunos de ellos se admiraran del acuerdo alcanzado por PSOE con el PP para el reparto del órgano de gobierno de los jueces, es decir, del Poder Judicial. No repararon en que cuando el PSOE aceptó ese acuerdo, equilibrado solo en apariencia, tenía ya marcadas todas las cartas: ya se había hecho con el órgano judicial supremo. Sí, ya sé que los juristas dicen que el Tribunal Constitucional no forma parte de la administración de justicia, pero eso es una falacia, como se ha demostrado con las sentencias que está dictando en el tema de los 'ERES' y con todos los que han caído en su mano en que tenga algún interés el gobierno. Al Tribunal Supremo, que supuestamente es el supremo intérprete de la ley, le han usurpado completamente esta función y por tanto a 'Pedro Maduro' le importa un rábano la composición de cualquier tribunal que no sea el Constitucional, porque al final, hasta las multas de tráfico que se impongan a los socialistas o adláteres terminarán anuladas por el Constitucional.
Este dominio que Pedro Sánchez ha impuesto en todos los poderes del Estado, ha sacado ya la zarpa dictatorial en el incidente sufrido esta semana por Nacho Cano a cargo de la 'policía política' bajo las órdenes del servil Marlaska. Cuando el gobierno de un país se atreve a usar la policía para asustar a los ciudadanos de ideas contrarias al gobierno, es que la dictadura se ha instalado en el país que lo sufre. España. Con Pedro Sánchez, hace tiempo que inició el camino a la dictadura… Ya hemos llegado.