La residencia San José abrirá en junio su unidad de paliativos

Á. de la Paz
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El recurso sociosanitario adscrito a la Diputación incorpora un servicio de atención a la etapa final de la vida, con 14 habitaciones adaptadas y un equipo multidisciplinar

Cedillo y Arias atienden a la explicación del arquitecto de la obra en la residencia San José. - Foto: David Pérez

La Diputación de Toledo presentó el inicio de las obras para la construcción de la nueva unidad de cuidados paliativos que integrará la residencia San José, centro dependiente de la institución provincial. La intención de la administración pública es disponer del nuevo servicio a partir de junio.

La unidad que el geriátrico ubicado junto a la carretera de Mocejón añadirá a su oferta asistencial constará de 14 habitaciones individuales. Las estancias se equiparán con baño asistido y una cama para acompañantes. Además, los paliativos estarán atendidos por un equipo multidisciplinar de profesionales, incluidos médicos, enfermeras, psicólogos, trabajadores sociales, fisioterapeutas, administrativos o personal de limpieza, que velarán por «las necesidades sociales, psicológicas e incluso espirituales de los usuarios», explica Concepción Cedillo, presidenta de la Diputación. Se incluirá una guía de orientación y apoyo emocional a las familias como ayuda para afrontar el proceso de la enfermedad y el duelo.

La responsable de la institución supramunicipal se felicita por un proyecto que responde a «un compromiso» del equipo de Gobierno que preside «con el bienestar de todos los toledanos». La creación de un unidad específica de paliativos supone una apuesta en favor de «la calidad de vida de todos los enfermos y todas las personas que necesitan estos cuidados paliativos». La inclusión de este servicio, asimismo, representa «también un compromiso con la vida en todas sus etapas, incluso en las más dolorosas y delicadas», añade.

Desde la Diputación presumen de la incorporación de un servicio que convertirá a la residencia San José en el primer centro sociosanitario de Castilla-La Mancha con unidad de paliativos.

En la misma línea, el vicepresidente de Bienestar Social, Familia y Juventud, Daniel Arias, celebra el inicio de unas obras que transformarán al recurso destinado a la tercera edad en un espacio más completo. «Dijimos que la residencia sería un centro social sanitario referencia en la provincia y en la región y eso es lo que queremos hacer», remarca.

Arias ensalza el esfuerzo del bipartito que sostiene el Gobierno provincial por atender las «necesidades» de la población toledana y «cumplir» con las diferentes «promesas» adquiridas por el Ejecutivo de la Diputación.

Más allá de las actuaciones para erigir la nueva unidad de paliativos, la residencia San José ha renovado sus dependencias en los últimos meses con la reparación de los comedores de uno de los pabellones de residentes, la nueva licitación para la cafetería o la rehabilitación del aula de formación.

Además, el vicepresidente de la Diputación abre la puerta a la colaboración del geriátrico con otras instituciones, entre ellas, la Universidad de Castilla-La Mancha. Las líneas esbozadas incluyen docencia, práctica e investigación. Del mismo modo, la residencia plantea la posibilidad de recibir pacientes del Hospital Universitario de Toledo o de otros centros sanitarios del Sescam que requieran atención en la etapa postrera de la vida.

UN GRAN RECURSO. La residencia social asistida San José cuenta con 302 usuarios, 274 en el geriátrico y 28 en el centro de día destinado a enfermos de alzhéimer. Hay tres centenarios, 17 residentes con entre 95 y 99 años y otros 40 con edades comprendidas entre los 90 y los 84 años. Además, este servicio emplea a unos 400 trabajadores.