Infraestructuras, menos fiscalidad y una burocracia más sencilla fueron algunas de las peticiones realizadas ayer por los alcaldes de municipios en el eje de la A-5, reunidos en Talavera para sentar las bases con las que participar del crecimiento en el eje económico Madrid-Lisboa. El alcalde de Talavera, José Julián Gregorio, junto a Ángel Martín, alcalde de Santa Cruz de Retamar, que propició este encuentro, y el presidente regional del PP, Paco Núñez, lideraron un encuentro con una veintena de alcaldes y diputados regionales que nace con visos de seguir creciendo y que pretende desarrollarse junto al nudo de comunicaciones entre las dos capitales de la Península Ibérica.
Gregorio recordó que este es el momento «fundamental» para reivindicar que estos municipios junto a la autovía puedan nutrirse del crecimiento que se espera de este eje. Junto a la Alta Velocidad, que busca su mayor impulso con la celebración del Mundial de Fútbol 2030 entre España y Portugal, se encuentra también el posible aeropuerto deCasarrubios, como segundo de la Comunidad de Madrid.
Gregorio ha explicado que se trata de una primera toma de contacto donde se ha establecido una estrategia de trabajo y las reuniones se sucederán implicando a empresarios y asociaciones. «Creemos que este nudo de comunicaciones se tiene que desarrollar ya para que Talavera y el resto de municipios crezca, porque debemos ser un gran foco de atracción».
Estas localidades han dado el primer paso pero no pueden hacerlo solas. Reclaman el apoyo de administraciones como el Gobierno de Castilla-La Mancha para que esta zona «sea ya una realidad y no sea algo de futuro, que se convierta en ese centro empresarial, de trabajo, en el que todos salgamos fortalecidos», indicó el alcalde talaverano.
Por su parte, el presidente regional del PP,Paco Núñez, aseguró que el paso de la A-5 por la provincia toledana es «una de las zonas en las que la región puede apoyarse para experimentar una evolución de crecimiento de manera progresiva, apoyado en la comunicación de Madrid con Lisboa». «Esta es la perspectiva con la que tenemos que mirar este eje», una de las zonas con mayor capacidad de crecimiento, según defendió en campaña electoral y ahora cree «con más credibilidad».
Para ello, ha apostado por diversas medidas que ayudarían a que la región participe, se implique y se vea beneficiada por este crecimiento, entre ellas mejorar las infraestructuras existentes, simplificar la burocracia, poniendo como ejemplo la agilidad de la que dispone Madrid, y rebajar la fiscalidad, «ya que en Castilla-La Mancha es mucho más costoso pagar impuestos que en Madrid o Extremadura». «No podemos ir a dos velocidades», añadió.
Es aquí donde es fundamental el apoyo del Ejecutivo regional, al que pidió «entendimiento, consenso y diálogo» con las comunidades vecinas.
Núñez considera obligatorio que haya entendimiento de Castilla-La Mancha con los gobiernos de Madrid y Extremadura, «que tienen que ser nuestros aliados» y no estar «a palos» continuamente. En este sentido, se preguntó en qué beneficia a Talavera y a los pueblos de la A-5 que «Page esté continuamente enfrentado» a Madrid, Extremadura o al Gobierno de España.
«Necesitamos situar a nuestros pueblos en el epicentro de ese crecimiento», que será un crecimiento logístico, empresarial, poblacional, social y, por ende, económico.
Núñez insiste en que en esta parte de la comunidad autónoma es «una de las zonas con mayores posibilidad es de expansión, uno de los puntos con mayor perspectiva de crecimiento» mirándolo desde un marco global y en el eje Madrid-Lisboa, en pleno crecimiento, como así han reconocido los gobiernos de España y Portugal.
Así, para que este crecimiento en el entorno de Talavera y el resto de municipios «no les sea ajeno», el presidente regional del PP asegura el trabajo «en primera persona» de los alcaldes, además de empresarios y asociaciones que quieran sumarse, para generar sinergias positivas, y espera el del Ejecutivo regional.