El uniforme militar confeccionado para el primer duque de Wellington, Arthur Wellesley (1769-1852), con motivo de su nombramiento como capitán general del Ejército Español en agosto de 1809 se expone desde el miércoles por primera vez al público en la majestuosa residencia en Londres de Apsley House.
El atuendo, compuesto de abrigo negro y cintura roja, elaborado y decorado con bordados de oro, que se combinaba con pantalones rojos y sombrero adornado con una pluma del mismo color, fue un reconocimiento a su victoria sobre los franceses en la Batalla de Talavera, el 28 de julio de 1809.
Allí el teniente general Wellesley lideró a los ejércitos aliados del Reino Unido, España y Portugal, en varias gestas militares, siendo las más notables la de Salamanca (1812) y Vitoria (1813).
Conocido por derrotar a Napoleón en la histórica batalla de Waterloo (18 de junio de 1815), mediante algunos de los atuendos que llevó se pueden averiguar hoy detalles curiosos de la extraordinaria vida.
Junto con el uniforme 'español', se exhiben otros cuatro, confeccionados en reconocimiento a las victorias logradas por el duque en las guerras napoleónicas.
Cuatro de los uniformes exhibidos representan su nombramiento como Mariscal de campo del Ejército portugués, en 1809; de capitán general para el Ejército español (1809); Mariscal de campo del Ejército británico (1813) y Mariscal de Campo del Ejército austríaco (1818).
El quinto corresponde al de Coronel de la Guardia granadera (1827), el regimiento de infantería más sénior del Ejército de este país, y solo este último y el de mariscal del Ejército británico ya habían sido expuestos anteriormente.
En la presentación a los medios, la comisaria Olivia Fryman dijo que esos trajes se utilizaban en ocasiones grandiosas como batallas, banquetes o comparecencias ante instituciones "y el español se utilizó para reflejar su rango y también para mostrar solidaridad con los españoles; una manera de diplomacia así como para enfatizar la naturaleza colaborativa del conflicto".
Ese uniforme fue realizado en 1809 "cuando fue nombrado capitán general del Ejército español, el rango más elevado y equivalente a mariscal de Campo en Inglaterra" en un momento en el que el duque "lideraba activamente las tropas portuguesas y españolas contra los franceses en la Guerra de la Península".
"Aunque esos uniformes eran ceremoniales, reflejan el tipo de papel activo que el duque desempeñaba en las guerras napoleónicas en esa época", destacó.
Sin embargo, Wellington era bien conocido por evitar ponerse durante las batallas ese tipo de indumentaria tan formal y solía decantarse por ropa de civil.
"Mientras otros generales afrontaban las batallas con sus uniformes de vestir, y se adornaban con todas sus condecoraciones e insignias, Wellington era bastante diferente, ya que es un hombre práctico y bastante modesto, y muy particular sobre su indumentaria. Él va a la batalla ataviado con pantalones en tonos crema, un abrigo oscuro, una capa oscura y un sombrero", observó Fryman.