Las cenizas, el enemigo que nunca se apaga

J.Moreno
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Una oleada de incendio de contenedores por los rescoldos obliga a los bomberos del Consorcio a alertar del peligro de los restos de braseros, causantes de numerosos avisos

Las cenizas, el enemigo que nunca se apaga

Un mando de los bomberos del Consorcio Provincial ha encadenado tres guardias con salidas causadas por las cenizas mal apagadas. El servicio de Diputación ha atendido unos seis siniestros de contenedores en una semana en la ciudad de Talavera. Tan extraordinario, que los agentes han decidido advertir del riesgo de estos rescoldos mal apagados. Incluso ayuntamientos como el de Ugena han detallado a sus vecinos cómo proceder para mitigar el peligro del fuego.

Los bomberos han difundido en sus canales de comunicación que resulta «terminantemente prohibido» verter en los contenedores de recogida de basura, las cenizas procedentes de estufas, braseros y calderas domésticas. En este sentido, constata el riesgo de un incendio del propio contenedor, o incluso del camión de transporte de basura. «Puede provocar que las llamas se propaguen a edificios, vehículos o incluso a zonas forestales», subrayan el mensaje de los 300 bomberos dependientes de la institución provincial.

La advertencia incluye consejos como evitar el depósito de ceniza, brasas o carbones en los contenedores de plástico, puesto que las brasas pueden tener fuego latente durante varias horas. Al respecto, se recomienda disponer de un cubo o recipiente metálico donde depositar las cenizas durante un día. Algunos ayuntamientos ofrecen esta posibilidad a los vecinos para atenuar el riesgo.

«Si disponemos de jardín o terraza es un buen sitio para tener el cubo metálico con las cenizas. Sumergirlas en agua para estar completamente seguros de que no pueden prender. Precaución con el humo, no inhalar», prosiguen los agentes del Consorcio Provincial, repartidos entre los parques de Toledo, Talavera, Orgaz, Santa Olalla, Belvís de la Jara, Illescas y Villacañas. En breve, se incorporará el de Vilolarrubia de Santiago.

Los consejos de este servicio de emergencias provincial incluyen que los usuarios del carbón deben dejar que se enfríe durante 48 horas. «Se puede verter agua sobre el carbón caliente y moverlo con cuidado para acelerar el proceso de enfriamiento. Precaución con el humo, no inhalar», recalcan en este mensaje.

El riesgo de incendio de contenedores por las cenizas se sucede cada invierno. Por ejemplo, el Ayuntamiento de El Real de San Vicente denunció en 2019 el incendio de tres contenedores del municipio en sólo una semana porque los vecinos arrojan las cenizas encendidas. Supuso un fuerte desembolso para el Consistorio, que tuvo que reparar los desperfectos. Como medida, el Consistorio adquirió seis recipientes metálicos para el depósito de la ceniza.

Más recientemente, como publicó este diario, hubo tres incendios en la carga de los camiones de la basura de Gesmat, a consecuencia de la ceniza. Urda registró dos siniestro entre noviembre de 2023 y febrero de 2024. Por ello, el Ayuntamiento lanzó advertencias sobre el peligro.

Meses antes, el 17 de abril de 2023, los empleados de Gesmat sufrieron una emergencia parecida en Seseña. Hacia las 21:45 de la noche, las tres toneladas que guardaba uno de los camiones del servicio público ardían. Los trabajadores de la recogida de basura condujeron hasta el aparcamiento de la calle Lepanto de Seseña Nuevo para garantizar la seguridad por el volcado de las toneladas de basura.