El calendario se ha ajustado a las previsiones que manejaba la Junta para la reapertura de la Mezquita de Tornerías como Centro Regional de Promoción de la Artesanía. Tras más de doce años cerrado, el edificio será inaugurado hoy y vuelve a abrir sus puertas después de una intensa rehabilitación que ha exigido un significativo incremento presupuestario.
La vuelta a la vida de este conjunto histórico estaba prevista para antes de finalizar el año, tal y como expresó la consejera de Economía, Patricia Franco, en la inauguración de Farcama, pero no ha sido posible cumplir esta fecha y se planteó el 15 de enero, dado que aún quedaban algunos ajustes.
La intervención ha exigido años de investigación arqueológica y de rehabilitación de esta mezquita del siglo XI, construida sobre una edificación monumental tardo antigua (siglosV-VIII). Además, el proyecto se ha ido encareciendo y ha obligado al Gobierno regional a realizar un importante esfuerzo presupuestario, ya que inicialmente se estimó la rehabilitación en un millón de euros y la factura final ha sido de 1,7 millones de euros.
La última operación de estas características se llevó a cabo en febrero, mes en el que la Junta autorizó un gasto de medio millón de euros para el mobiliario de Tornerías, un edificio que pretende albergar una oficina de turismo, una tienda para productos de artesanía y zonas para hacer talleres artesanales, co-working y celebrar eventos culturales.
El proyecto. El Ayuntamiento concedió la licencia de obras para la rehabilitación integral de Tornerías hace justo cuatro años, un proyecto que se adjudicó a la UTE 'ISC Uramid-CYR Proyectos y Obras'.
En su momento, los arquitectos redactores plantearon una estructuración del edificio en distintos niveles para generar la «diafanización del espacio conectando todas las partes de cada una de las plantas», porque no hay que olvidar que el inmueble es «una superposición de varios», distribuido en torno a cuatro niveles tanto históricos como de nueva construcción.
Por tanto, en el nivel situado a la altura de la calle Tornerías se ubicará el acceso principal y espacio de recepción, desde donde se podrá pasar al control de acceso-información y a la tienda «sobre unas pasarelas de vidrio dotadas con iluminación y mobiliario específico».
En la siguiente planta, la de la mezquita, se contará con un espacio para exposiciones temporales aprovechando la cobertura del patio actual. La siguiente planta se destinará a la zona administrativa y al área de trabajo y coworking. Por último, en la última planta se planificaron terrazas y zonas exteriores. Al margen, el proyecto apostó por cubrir el espacio para albergar una gran sala destinada a almacenamiento, exposiciones y biblioteca. Allí podrán celebrarse eventos y conferencias.