Sonó como un misil. En las propias instalaciones, en las colindantes y hasta en ciertos puntos del barrio residencial del Polígono. Afortunadamente, el estallido del sonido ha sido más notorio que los daños ocasionados, que se reducen a un herido de gravedad y otro de carácter leve. El primero de ellos fue trasladado de urgencia a la Unidad de Quemados de Getafe, donde se encuentra estable dentro de la gravedad después de registrar un 15% de quemaduras en su cuerpo, especialmente en manos y piernas. El segundo de ellos fue desplazado hasta el Hospital Universitario de Toledo, afectado por inhalación de humo y por quemaduras menores.
Los hechos ocurrieron sobre las 12:34 horas del día de ayer, cuando una fuerte explosión detonó en el interior de las instalaciones de Alcaliber, una farmacéutica ubicada en la calle Ventalomar, en el Polígono industrial. Desde ese momento, una intensa columna de humo gris se elevaba por el cielo toledano, obligando a desalojar la nave con los 40 trabajadores que se hallaban en su interior, así como a cientos de otras empresas ubicadas en el entorno.
La rápida llegada de los Bomberos de Toledo, así como los propios mecanismos de defensa de la planta, con sistemas de espumados, frenaron la extensión del incidente garantizando la seguridad en el entorno y evitando nuevas explosiones. Hasta el lugar de los hechos se desplazó una dotación de 15 bomberos municipales, junto a dos suboficiales y un oficial. De igual modo, diversas patrullas de Policía Local y Nacional trabajaron de forma coordinada en el dispositivo de prevención y seguridad de los trabajadores desalojados y del tráfico.
Un trasvase de líquidos generó la explosión del Polígono - Foto: Yolanda LanchaDe hecho, durante algo más de una hora ningún vehículo pudo acceder a la entrada de Alcaliber, como consecuencia del corte de todos los accesos a este punto, al establecer un perímetro de seguridad de alrededor de 600 metros.
Causas del accidente. La explosión se produjo como consecuencia de la manipulación de un depósito de isobutanol, un tipo de alcohol que se utiliza como barniz, componente de biocombustible o disolvente en reacciones químicas. Según ha podido saber La Tribuna por varias fuentes de la investigación, las causas de este episodio químico se deben a un trasvase de líquidos. Trabajadores de la empresa se encontraban desarrollando labores de limpieza de varios contenedores o envases, cuya labor se debe acometer mediante una disolución de agua y la sustancia mencionada -isobutanol- en cantidades muy concretas. Un mal cálculo de la misma, así como otros factores añadidos en el proceso, son los desencadenantes principales del incidente en Alcaliber.
Los diversos cuerpos implicados en la investigación no descartan que al trasvasar los líquidos de unos a otros bidones se haya podido generar electricidad estática, alterando los materiales al ser altamente inflamables. Esta última posibilidad no está confirmada.
Un trasvase de líquidos generó la explosión del Polígono - Foto: Yolanda LanchaA los pocos minutos de detectarse la explosión, el alcalde Carlos Velázquez se trasladó junto a otros ediles de su equipo de gobierno al lugar de los hechos. Allí, conoció lo ocurrido de primera mano y confirmó a los medios de comunicación las informaciones relativas a los afectados.
De manera progresiva se fue reestableciendo la normalidad, al abrirse de nuevo la calle Ventalomar al tráfico en torno a las 14.00 horas de la tarde. Momento en el que los trabajadores desalojados de otras empresas pudieron volver a sus puestos de trabajo, a excepción de los de la nave siniestrada, ya que aún se estaban desempeñando labores de prevención y de seguridad. Al lugar de los hechos también se desplazaron agentes medioambientales para valorar si la situación requería de nuevas medidas, así como responsables de Inspección de Trabajo.
Fue de nuevo el primer edil, Carlos Velázquez, el que ofreció la información de que la inhalación de la sustancia vertida no era tóxica o perjudicial para la salud, dado que no presentaba riesgos por inhalación, sino únicamente de combustión.
Cerca de las 14:45 horas, los aproximadamente 40 trabajadores de Alcaliber pudieron retornar a su centro de trabajo para continuar su jornada laboral o recoger sus pertenencias, en lo que pudo ser para ellos el final de una mala experiencia. La investigación deberá seguir su curso para determinar lo ocurrido.
Más allá de los heridos mencionados, la explosión generó otros daños materiales como la rotura de cristales en los ventanales de la fábrica o el desprendimiento de parte de un muro que cayó sobre un camión cisterna, ocasionando daños leves en el mismo.
En un determinado momento se contabilizó un tercer herido, pero luego se constató que se debía a que otro de los trabajadores sufrió problemas en un hombro durante los momentos de evacuación.