Los sindicatos con representación en el comité de empresa del Banco CCM son unánimes al criticar la estrategia empresarial del Grupo Liberbank, al que pertenece, y que pasa por el traslado de los servicios centrales a Toledo. Una medida que, de llevarse a cabo, pondría en riesgo el empleo de unas 200 personas en la ciudad de Cuenca, de la que dijeron sería «la gran damnificada».
Miguel Ángel Cubillo (CCOO), José María Gámiz (UGT), José María Moreno (CSICA), y José Ángel Buendía (CSIF), realizaron ayer una rueda de prensa en la que advirtieron que el objetivo de Liberbank es crear una empresa nueva en Toledo para hacerse cargo de «una parte importante de los servicios centrales que se prestan en Cuenca».
Cubillo explicó que se trata de una externacionalización de los servicios y «no se sabe qué pasará con los trabajadores de aquí», pero lamenta que lo único claro es que será una«sustitución de empleos de calidad por precario y contratos con un menor sueldo y fuera del convenio de Cajas de Ahorro».
Todos los representantes sindicales mostraron su preocupación también por la forma en la que va a afectar a la ciudad «muy ligada a estos servicios centrales». Según relataron, los primeros que sufrirán la pérdida serán «los trabajadores que lo sientan en su propia piel», pero después «la gran damnificada será la ciudad». En este sentido, subrayaron que una pérdida de puestos de trabajo tan importante se dejará notar en todos los sectores y recordaron que desde 2009 se han perdido otros 150 empleos directos en la capital. «Antes teníamos una locomotora en CCM y ahora sólo nos queda un pequeño vagón», dijo el representante de CSIF.
Destacan que desde que tuvieron conocimiento de la intención, «a través de la intranet de la empresa», comenzaron a realizar acciones para intentar evitar las consecuencias negativas que incluye un estudio de los servicios jurídicos de los sindicatos de la posibilidad de interponer una demanda.