La selección española masculina de waterpolo ha vapuleado por 23-8 al combinado de Japón, con multitud de goleadores, en su cuarto partido dentro de la fase preliminar en los Juegos Olímpicos de París (Francia), certificando así los pupilos de David Martín su billete matemático para los cuartos de final, y además siendo líder impoluto de Grupo B.
Cinco goles marcados por Bernat Sanahuja, cuatro de Álvaro Granados, otros cuatro de Roger Tahull, dos de Alejandro Bustos, dos más de Alberto Munárriz, otros dos de Martin Famera, uno de Sergi Cabañas, otro de Miguel de Toro, otro de Felipe Perrone y otro de Unai Biel rubricaron la abultadísima victoria españolas en el Centro Acuático parisino.
Poco más de tres minutos duró la resistencia del conjunto japonés, rival propicio para la actual seelcción campeona de Europa. No en vano, Japón ocupaba antes de este duelo la última posición del grupo después de caer en sus primeros tres partidos ante Serbia, Francia y Hungría.
Granados inauguró el marcador con un lanzamiento potente desde el lado derecho del ataque español. Taiyo Watanabe mandó un tiro al poste en la siguiente jugada y Álex Bustos castigó ese escenario, con el 2-0 en un disparo lejano que rozó en Tahull. Casi a continuación, en la posición de boya, el propio Tahull resolvió un buen ataque con el 3-0.
A 1:10 de zanjar el primer cuarto, De Toro al contragolpe anotó el 4-0. Nada más arrancar el segundo periodo, Tahull repitió con el 5-0 y acto seguido Granados coló el 6-0 con un derechazo sin ángulo. La cuenta anotadora de Japón se abrió gracias a Seiya Adachi, transformando un penalti.
Tahull seguía en racha y convirtió en puesto de boya el 7-1, pero fue entonces cuando apareció en escena la pesadilla nipona. Sanahuja hizo el 8-1, el primer gol para su tarjeta de estadísticas, con un lanzamiento picado en el agua. Keigo Okawa redujo distancias, pero fue anecdótico ya que Sanahuja consiguió el 9-2 con otro zambombazo de los suyos.
Otros dos palos sufrió el equipo japonés antes del descanso, primero uno literal en un tiro de Watanabe y luego otro metafórico con el 10-2 marcado por Famera en un despiste defensivo de los asiáticos. Con todo el 'pescado' vendido, el tercer cuarto fue una secuencia de goles por ambas partes y que favoreció la idea de España en busca de tranquilidad.
De manera paradójica, tardaron dos miuntos en verse goles después del descanso, pero luego cayeron a chorros. Yusuke Inaba, pichichi de estos JJ.OO. hasta el comienzo de este partido, marcó de penalti. Y replicó de inemdiato el capitán español, Felipe Perrone, en una jugada de 1 vs 1.
Adachi, Biel, Okawa... muchos jugadores se tomaron la libertad de definir de manera individual, aderezando sus números de este torneo. y tampoco podía faltar Sanahuja, anotando más y más goles en tiros con sencillez en su ejecución. El último periodo, con parcial acumulado de 6-2 para los de Martín, fue una gran balsa de aceite hasta amarrar el triunfo.