La Asociación de Vecinos La Voz del Barrio se teme que la regeneración urbana de Palomarejos «en lo que se refiere a la recuperación de espacios para construir viviendas y equipamientos va para largo». Así lo afirma el presidente vecinal, Paco Arce, tras el encuentro de la pasada semana con el alcalde de la ciudad, Carlos Velázquez. Porque «no vemos que el equipo de Gobierno tenga proyecto alguno al respecto sobre el barrio en su conjunto, ni tampoco vemos voluntad política para hacer realidad los Consejos de Participación en los Distritos, cumplir su Reglamento y poner en práctica una participación real más que formal». «Y este tipo de reuniones si solo van a servir para hacernos una foto, y reiterar las deficiencias y carencias existentes sin plasmarlas progresivamente en los presupuestos municipales, pues entendemos que sobran», apuntó. Este fue el segundo encuentro entre ambas partes, después del mantenido el 28 de noviembre. Tras repasar los puntos de la anterior reunión, los vecinos han comprobado «que nada se ha hecho con la excepción de la puesta en marcha del espacio dedicado a ludoteca que se dedica en principio al programa Corresponsables».
Poco ha avanzado el Plan de Regeneración Urbana de Palomarejos, se lamenta Arce, dado que el eje del edificio de Escuela de Enfermeras, hospital y Cuartel está parado. El alcalde manifestó que ha habido encuentros con la Tesorería de la Seguridad Social para rehabilitar la Escuela como apartamentos para estudiantes, «pero al parecer debe tasarse el edificio para decidir posteriormente la cesión, venta, permuta, etc.», apunta Arce. La Asociación pide que sea propiedad municipal para evitar «que caiga en manos privadas». El terreno del antiguo hospital sigue en manos de la Consejería de Sanidad, tres años después. La Asociación insiste en la construcción de viviendas de promoción pública, gestionadas por instituciones públicas con un porcentaje para venta y otro porcentaje para alquiler, espacios para uso terciario y espacios para equipamiento, como una biblioteca para el distrito y un salón de actos. Finalmente, no hay noticia del traslado del Cuartel. Aquí la Asociación también quiere viviendas de promoción pública.
En cuanto al barrio de Korea, La Voz del Barrio insistió en actuaciones de rehabilitación energética, restauración de fachadas, cambio de carpintería, instalaciones en general y ascensores, pero se lamentó de que parece que «esta Corporación tampoco tiene interés alguno en actuar en esta zona, ni tan siquiera utilizando la posibilidad de los fondos europeos». Reclama un proyecto previo de actuación partiendo de un diagnóstico de la situación, cuantificando el mismo y su forma de financiación, algo para lo que no ve receptivo al Ayuntamiento «porque es caro».
Servicios. Más allá, la Asociación trasladó a Velázquez la necesidad de continuar con la rehabilitación del centro cívico de Palomarejos, «edificio abandonado durante muchos años por el Ayuntamiento». Le explicaron que se precisa la reparación de la cubierta para evitar las goteras y humedades existentes, la instalación en todas sus aulas de aire acondicionado y calefacción, el cambio de iluminación, el pintado interior de todo el edificio y la rehabilitación del sótano que tiene un espacio apuntalado.
Por su parte, el alcalde apuntó que se dispone de una partida de 50.000 euros que se destinará a la reparación de la cubierta y adquisición de equipos de aire acondicionado hasta donde llegue la cantidad citada. Para Arce es «poca cosa».
La Asociación pidió que continúen las obras de rehabilitación realizadas hasta ahora en el parque de las Tres Culturas (reparación estanque, cascadas , fuente central y la obra del pabellón cubierto). «Hacemos hincapié en la rehabilitación del anfiteatro, los servicios y camerinos, así como la parte posterior del anfiteatro para darle otra funcionalidad, y proponemos la instalación de asientos en las gradas del anfiteatro, semejantes a los existentes en otras instalaciones deportivas», apunta Arce. Los vecinos incidieron en que el parque tiene una iluminación pobre, parece conveniente dotarle de una mayor potencia. Y pidieron mesas picnic y un kiosco bar. Aquí Velázquez se mostró de acuerdo, pero falta dotación presupuestaria.
La Asociación incidió en el Plan de Arbolado, que ya propuso en el Consejo de Distrito del 7 de noviembre de 2023, donde se aprobó por unanimidad. Principalmente, pidió la construcción de alcorques, para la posterior plantación de árboles adecuados a estos espacios. Arce entiende que con 100.000 euros de presupuesto para toda la ciudad este año «difícilmente se puede acometer con seriedad plan alguno de arbolado».
La Asociación insiste en el incremento de mobiliario urbano en varias calles del barrio. Preguntó por su propuesta de reordenación de la ORA, algo que entiende que es independiente de otras actuaciones en la ciudad. Y pidió una reordenación de la Participación Ciudadana en Toledo. Finalmente, comunicó a Velázquez «que el mantenimiento en general del barrio es deficiente y lento en las actuaciones. Hay pequeñas chapuzas de poco coste están varios meses sin solucionar lo que provoca mala imagen ante el ciudadano».