El pabellón Municipal de Cobisa se quedó pequeño para acoger la primera edición del gran derbi de esta temporada, que se acabó resolviendo con tablas (3-3) después de una primera parte para cada uno. El Soliss AD Bargas FS no supo mantener la renta obtenida de 1-3 y acabó pidiendo la hora gracias a las paradas salvadoras del de siempre: Fidel.

Decenas de aficionados se tuvieron que quedar fuera por el escaso aforo de la instalación. Se perdieron unos primeros minutos en los que el Cobisa Futsal no estuvo tan lúcido como en las jornadas precedentes. Llegaba con una racha espectacular de nueve victorias consecutivas, pero se dio de bruces con la realidad ante un rival muy motivado y necesitado.

En cualquier caso, tardaron en llegar las ocasiones claras. Ninguno pudo convertir sus llegadas, más del lado rojillo. Hasta que Ruby, que se echó el equipo a la espalda, anotó el 0-1 en el minuto 12. Hubo un atisbo de reacción del conjunto de Quique Soto, pero no se tradujo hasta unos minutos después, gracias al empate de Anass.

El Cobisa y el Bargas FS se dividen el derbi (3-3)

Pero el Bargas FS no quería dejar escapar la ocasión de apoderarse de tres puntos que le hacen falta para recuperar el vuelo, y Raúl Solano puso de nuevo en ventaja a los suyos poco después. No sucedió mucho más hasta el descanso, más allá de la tensión propia de estos enfrentamientos.

El refrigerio le sentó mejor al equipo local. Sin encontrar la fluidez que les ha caracterizado esta campaña, los aurirrojos buscaron las tablas con intención. Pero se encontraron con el 1-3 de Lucas. Ahí sí que se produjo el punto de inflexión. Otra vez los nervios acabaron jugando una mala pasada al Bargas FS, sobre todo después del 2-3 de Anass.

Jota fue el estile de los de casa. Y Fidel, el de los de fuera. Las sacó en todas las posturas y fue manteniendo con vida a su equipo. No pudo hacer nada por evitar el 3-3 definitivo de Peces, pero se marchó ovacionado del Municipal.