El cádaver de Las Lanchas es el de un joven de 32 años

J.Moreno
-

Los padres del treinteañero, de La Nava de Ricomalillo, denunciaron la desaparición dos días antes del hallazgo del cuerpo flotando en la quinta cascada. Dos excursionistas encontraron el cadáver en esta zona, a una hora del aparcamiento.

Despliegue para recuperar el cadáver hallado en Las Lanchas. - Foto: Guardia Civil

Una pareja de excursionistas de Talavera halló el 31 de diciembre, hacia las 12:30 de la mañana en un día de niebla y lluvia, un cadáver en la Garganta de las Lanchas, en el término de Robledo del Mazo. Los senderistas eligieron para la caminata de cierre de 2023 uno de los parajes más hermosos de la provincia. Hacía un tiempo desapacible, pero ambos continuaron la marcha más allá de las indicaciones del sendero de la Diputación, que finaliza en la tercera cascada, y descubrieron el cuerpo.

El fallecido flotaba en la masa de agua de la quinta cascada, una zona de difícil acceso conocida como 'La cueva de Blas Romo', a más de una hora a pie del aparcamiento de la pedanía de Las Hunfrías utilizado para las caminatas por este paraje natural, donde no había ningún coche que perteneciera al fallecido.

Los senderistas frecuentan los fines de semana esta microrreserva jareña, que figura recientemente entre los senderos amparados por la Diputación con un recorrido oficial de cuatro kilómetros de distancia, que comienza entre pinares y continúa con robles entre jarales y brezales.

Los forenses confirmaron ayer la identidad del individuo: un joven de 32 años que constaba como desaparecido en La Nava de Ricomalillo. Los padres habían presentado la denuncia 48 horas antes. Desde entonces, la Guardia Civil había montado un despliegue de búsqueda con patrullas a pie y el apoyo de drones y perros especializados. Pero el cuerpo apareció finalmente a 20 kilómetros de distancia, en este recóndito y bello paraje de la provincia.

La pareja de excursionistas avisó al servicio de emergencias 112 de la aparición del cuerpo en la quinta y última cascada de la Garganta de las Lanchas. Entonces, la Guardia Civil contactó con el Ayuntamiento de Robledo del Mazo para localizar el lugar exacto del hallazgo, y un vecino del pueblo guio a los primeros agentes. Los habitantes de este rincón de la comarca de La Jara conocieron de esta manera y se conmocionaron con la primera aparición de un cadáver en esa zona de naturaleza plena, caracterizada por la pervivencia de los bosques de laurisilva.

Otro vecino de Robledo del Mazo acompañó minutos más tarde a los bomberos de la Diputación hasta la cascada, con unos cuatro metros de altura. La poza tiene aproximadamente un metro de agua de profundidad.

Los bomberos del Consorcio Provincial del parque de Belvís de la Jara rescataron finalmente el cuerpo mediante unos ganchos, y el médico de urgencias desplazado confirmó el fallecimiento. El regreso se hizo ya de noche. Posteriormente, el cadáver fue trasladado al Instituto de Medicina Legal para el examen forense.