Las lluvias caídas a lo largo de este miércoles dejaron en Talavera más de 42 litros por metro cuadrado en una jornada que se saldó con varias incidencias a causa del temporal. Desde la medianoche del martes al miércoles el agua apenas dejó de caer en la ciudad, en determinados momentos causando acumulaciones en puntos donde se suele detectar este problema, como es la calle Carpinteros en confluencia con la avenida de Portugal, causando problemas tanto para el tráfico rodado como para los peatones.
No fue el único lugar afectado por las precipitaciones, que dejaron 42,6 litros por metro cuadrado hasta las ocho de la tarde de ayer. El momento en el que se registró más lluvia fue a las 9 de la mañana, cuando cayeron 8 litros por metro cuadrado; a partir de ahí comenzó a mejorar el tiempo, con la salida del sol a primera hora de la tarde, si bien fue algo momentáneo.
Las lluvias regresaron a partir de las 17 horas, en menor intensidad que una madrugada y una mañana que apenas dieron tregua a los paraguas y chubasqueros después de tiempo sin tener que darlos uso.
La lluvia deja 42 litros por metro cuadrado e incidencias - Foto: Fernando RejónEntre las 5 y las 9 de la mañana se vivieron las horas más lluviosas, con 4,4; 5,2; 7;y 8 litros por metro cuadrado respectivamente, lo que supone en este tramo horario un total de más de 26 litros por metro cuadrado, más de la mitad de lo caído hasta las ocho de la tarde de ayer.
Estas abundantes lluvias se tradujeron en una serie de avisos al servicio de emergencias 112 de Castilla-La Mancha, y a su vez en la movilización de los servicios precisos en cada una de las incidencias registradas.
Una de ellas se dio sobre las 10:15 horas en la calle del Pilar, donde se alertó del desprendimiento de unas tejas en una vivienda, por lo que tuvieron que intervenir los Bomberos del Consorcio Provincial para evitar cualquier posible peligro a la ciudadanía.
También actuaron los bomberos poco después en la calle Capitán Velarde, hasta donde se dirigieron tras un aviso por el riesgo de caída de la cornisa de un establecimiento comercial situado a pie de calle. Para garantizar la seguridad de los peatones se procedió a acordonar parte de la acera de esta céntrica calle y se dejó un agujero para la salida del agua. Los bomberos informaron además de que habrá que tirar la cornisa para evitar que se desplome, según ha informado el servicio de emergencias 112 a La Tribuna.
Otro de los incidentes se localizó en el entorno del Puente Viejo, en la zona del Kiosko, por la formación de una balsa de agua en este punto de la ciudad; y se sumó otro en el Camino de la Cabra por la presencia de ramas y cañas obstaculizando este sendero.
Asimismo, los bomberos tuvieron que intervenir ante la caída de un árbol de grandes dimensiones en un camino vecinal situado a la salida de Talavera, en dirección a Cervera de los Montes, junto a un vivero. Se tuvo que dar aviso además a Iberdrola puesto que al liberar una de las ramas se descolgó un cable.