El III Plan de Carreteras prioriza las actuaciones en los bordes de la región

S. GALA
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El avance del plan regional 2015-2016 observa un déficit en el estado de las carreteras de las áreas del borde y establece estudiar las carencias en tres ejes perimetrales y planificar la intervención

Este mapa representa la red estructurante de Castilla-La Mancha y los tres ejes perimetrales (en amarillo) en los que el plan propone actuaciones de mejora. - Foto: bmolinas

La situación económica no es para nada boyante y las consecuencias de la crisis todavía dejan ver su peor cara, pero sin embargo hay áreas y servicios en los que no se puede ni se debe dejar de invertir. Tal es el caso de las carreteras, por las que a diario miles de castellano-manchegos transitan para ir a trabajar o simplemente para trasladarse de un lugar a otro para realizar sus quehaceres más habituales. Y la carretera tiene sus riesgos, por lo que garantizar la seguridad de los conductores es, y siempre será, sin duda uno de los objetivos principales de cualquier Administración.

En este marco y pese a las dificultades económicas, la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha ha elaborado en esta legislatura el IIIPlan de Carreteras 2015-2016. Una planificación que contempla una serie de actuaciones en las vías que son de titularidad regional para mejorar la movilidad de los castellano-manchegos y de todos aquellos que pasen por estas carreteras de paso a otras regiones. Y es que la situación estratégica desde el punto de vista geográfico de Castilla-La Mancha requiere de una intervención permanente en las carreteras para garantizar el estado más óptimo de las vías y por ende la seguridad de los que se ponen cada día al volante.

La red viaria estructurante de Castilla-La Mancha está constituida fundamentalmente por la red básica autonómica más la red convencional del Estado. Precisamente el avance del IIIPlan regional de carreteras hace especial hincapié en que esta red estructurante sirve de soporte a las relaciones entre los principales nodos regionales y entre nodos de orden regional y comarcal, además de cubrir itinerarios con regiones colindantes.

Del análisis territorial efectuado para la elaboración de este plan se desprende que la red actual está consolidada en el interior de la comunidad, pero que en todo caso es necesaria la mejora, modernización y adecuación de ciertos tramos a un estándar de calidad que garantice y mejore la movilidad y accesibilidad.

Así, se observa un déficit en el estado de las carreteras de las áreas de borde regional, y se definen tres ejes perimetrales con el fin de aumentar la cohesión y completar la vertebración del territorio castellano-manchego.

El plan establece que se estudiarán las posibles carencias de estos ejes (de norte a sur, de este a oeste y de sur a norte), y que las actuaciones que resulten de esos estudios específicos serán prioritarias dada la importancia de las mismas y su contribución a la mejora de la accesibilidad y al desarrollo económico de las zonas afectadas.