Alfredo Santaelena le puso pocas objeciones a la sexta victoria consecutiva del CD Toledo esta temporada en la liga. Ganar en Las Pedroñeras, dijo el técnico, «fue difícil, como todos los partidos de esta categoría». Considera que el rival lo puso complicado a pesar de que se adelantaron en el minuto 8 de encuentro.
Cree que les faltó «algo de tranquilidad», sobre todo porque el cuadro local tuvo un par de ocasiones, en sendos saques de esquina, y uno de ellos dio en el palo. Es verdad que para el entrenador madrileño, sus jugadores «manejaron mejor el segundo tiempo, especialmente desde el minuto 55, ya con uno menos ellos».
De todos modos, piensa que ha algunas situaciones que se deben evitar: «No podemos conceder ciertas cosas cuando el partido está controlado, hay que intentar mantenerlo». Aun así, resaltó que una jornada más se mantuvo la portería a cero, algo que «tiene que ser la seña de identidad», y que se debe, desde su punto de vista, al «buen trabajo defensivo».
Como siempre dice, Santaelena apuesta por «seguir en esta línea». Uno de los pero es que pudieron haber sido «más ambiciosos», pero se queda «con las buenas sensaciones» y con «tres puntos importantísimos». Por eso le dio la enhorabuena a sus futbolistas una vez más.
No pasó la oportunidad de agradecer a la afición un nuevo desplazamiento, a más de 180 kilómetros de Toledo: «Es de agradecer, y nosotros vamos a intentar seguir aportando para que estén contentos». Considera que ahora mismo la hinchada es «nuestra fuerza», y se congratula de ello: «Tenemos que estar todos subidos en el mismo barco».
Asimismo, tras el encuentro en tierras conquenses, reconoció una vez que intenta hacer rotaciones porque cree «en los 22 jugadores». De todos modos, comentó, «habrá algunos que jueguen más y otros menos, pero me parece que ya debutaron todos».
Asimismo, agregó del mismo modo que no se cansa de decir que tiene «un gran vestuario, y, además, entrenan de la leche, con una intensidad increíble, por lo que hay un muy ambiente, en todo», finalizó el preparador del cuadro toledano, que indicó que la roja que vio Eteme fue «bastante clara», y desveló que «el chico se acercó para disculparse porque también lo vio así».