Un estreno con doble huella para Rafael Canogar. La Real Fundación de Toledo ha acogido esta tarde la presentación de una obra de arte, un catálogo que extracta una muestra de los caminos artísticos y de la creatividad del reconocido artista toledano, pintor y escultor de vanguardia.
Canogar, icono internacional del arte abstracto, volvió de nuevo a Toledo, a su casa, a su espacio expositivo inaugurado hace justo un año gracias a la presentación del catálogo, titulado 'La construcción de un lenguaje', una publicación de 170 páginas de mirada retrospectiva de un legado en constante informalismo y evolución. En definitiva, un doble regalo para un pintor que en mayo cumple 90 años y sigue «con la misma pasión e ilusión» que a los catorce, la edad en la que el arte cambio su vida y él revolucionó la pintura.
«El camino del artista no se hace para llegar a una sola meta, se hace día a día», explicó Canogar, emocionado por la presentación y por el volumen editado por la Real Fundación, justo un año después de ceder el tallerón de Roca Tarpeya para que más de una veintena de obras del artista puedan disfrutarse de manera permanente, y la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha a través de la Fundación Impulsa.
El pintor Rafael Canogar arropado por la presidenta de la Real Fundación, Xandra Falcó, el consejero de Educación y Cultura, Amador Pastor, y el alcalde de Toledo, Carlos Velázquez - Foto: Yolanda Lancha«Me siento en la gloria», remarcó Canogar, emocionado por un cálido acto que le dio voz para dejar claro que sigue en activo y dispuesto a vaciar su creatividad en muchos lienzos en blanco. «Estoy en la búsqueda de trabajar con mínimos elementos para buscar la radicalidad», dijo, convencido de que su camino plástico lo encontró «con las obras informalistas»para plasmar su rebeldía, compromiso social y la incesante busca de la libertad.
A su lado, Alfonso de la Torre, comisario del Espacio Canogar, puso el acento a esas otras obras escultóricas, sus más de 500 piezas gráficas y su pasión por el coleccionismo.
Canogar siempre ha tenido los pies en la tierra y ha mirado a Toledo. «Una generosidad notable con sus obras», apuntó la presidenta de la Real Fundación, Xandra Falcó, que resaltó la deuda que tenía la ciudad con Canogar que se ha saldado en Roca Tarpeya, «un anhelo esperado» en crecimiento gracias a este catálogo con fotografías de Javier Longobardo y Juan Barte.
Por su parte, el alcalde definió a Canogar como «una persona que lo ha hecho todo, pero sigue en búsqueda». Velázquez alabó su generosidad, esa que le está devolviendo la ciudad «para hacer justicia». Además, resaltó su aportación para colocar a Toledo como Capital Europea de la Cultura.
Por último, el consejero de Educación y Cultura, Amador Pastor, recordó «que el arte hace visible lo que a priori no es visible». En su opinión, el acierto se consigue cuando las administraciones «trabajan incansablemente al lado de los referentes».