Vanesa trabaja en prácticas en el Hotel Carlos V. Y Lucía se incorporará en breve a la plantilla de Puy du Fou. La presidenta de la Diputación, Concepción Cedillo, escuchaba también a Sandra y su mensaje conciso: «No hay que tirar nunca la toalla». Porque la visita a la asociación Down Toledo evidencia la paulatina suma de los socios al mercado laboral. «Pasan sus entrevistas, no es a dedo», incidía la presidenta, Trinidad Escobar. También, las oposiciones en el caso de los aspirantes a un empleo público.
Cedillo observaba ayer encantada al puñado de integrantes de Down Toledo en la sede del colectivo, en la calle río Yedra. A finales de 2024, 33 miembros desempeñaban un trabajo en empesas o instituciones públicas, con 12 contratos nuevos cada año. No obstante, la conclusión es que el nivel de incorporación laboral es bajo.
La Diputación quiere insuflar un soplo benéfico con más facilidades. La institución oferta siete plazas para prácticas laborales de tres meses de duración, dentro del programa formativo de Down Toledo. «Podrán desarrollar sus habilidades y mejorar sus perspectivas de empleo en el futuro. Contarán con el apoyo de dos tutores: uno de la Asociación Down Toledo y otro de la propia institución provincial, explicó la representante de la administración provincia, que invertirá 42.500 euros.
«No solo brinda una oportunidad a estos jóvenes, sino que también enriquece el entorno laboral de la Diputación, reforzando la idea de que la diversidad es un valor fundamental en nuestra sociedad y que su integración es responsabilidad de todos, especialmente de las administraciones públicas», resaltó Cedillo. Y añadió: «Desde la Diputación de Toledo seguiremos trabajando para que la inclusión no sea solo un ideal compartido, sino una realidad tangible en todos los ámbitos de la vida social y laboral. Queremos que esta experiencia sirva de ejemplo y motive a más instituciones y empresas a sumarse a este compromiso con la igualdad de oportunidades».
Los siete de prácticas se incorporarán al servicio de lavandería de la Residencia Social Asistida San José, propiedad de la Diputación.
Por su parte, el vicepresidente de la Diputación y responsable del área de Empleo, Joaquín Romera, confirmó que la colaboración se mantendrá durante los siguientes años de la legislatura. Trinidad Escobar enfatizó el enriquecimiento de propuestas como las de la Diputación. ·«Es algo muy grande para todos ellos y que debe continuar en el futuro», manifestó antes de subrayar que los miembros de Down Toledo pueden desempeñar cualquier trataba de sectores como administrativo o servicios.
«Las instituciones públicas deben dar ejemplo. El objetivo es tener un trabajo», señaló la presidenta de Down Toledo. Y apostillaba: «Hay que animarse y perder el miedo. Las empresas tienen miedo de contratar. Hay que quitar las barreras con las personas con discapacidad».
Escobar hizo hincapié en el «trabajo incansable» del personal de Down Toledo, quienes llaman a puerta tras puerta para dar un horizonte laboral al centenar de miembros del colectivo.
Los miembros de la asociación Down Toledo protagonizaron después del anuncio de la presidenta de la Diputación la habitual asamblea que aborda sus preocupaciones. De esta manera, la confirmación de las siete plazas en prácticas en la RSA San José ocupó seguro parte de la reunión. Y lo bien que su compañera Ana ejerció de presentadora del acto.