Esmeralda es bastante mayor y con una vida a ratos muy cruda, a ratos esperanzadora. Por el camino ha sufrido pérdidas, carencias, las represalias habituales de una posguerra, una violación, el robo de su hijo,y otras muchas vivencias que tejen sus ochenta y seis años, uno a a uno vividos con un poder especial inesperado, soñar el futuro.
«¿Se puede ser madre sin hijo? ¿Es posible sobrevivir a la tristeza?» Dos grandes preguntas de la editorial Ledoria acerca de la nueva novela del periodista Jesús Gallardo Ordoño, la quinta publicada hasta la fecha, y su noveno libro desde que se embarcó en sus aventuras editoriales.
«Es mi obra de madurez», apunta el autor sobre 'El beso', su última novela a la que ha dado forma en ocho o nueve meses desde que comenzó a tejer una historia que cuenta con 29 personajes principales, incluyendo a su gran protagonista Esmeralda, y otros 15 o 16 que se ha ido encontrando durante el proceso creativo. «Siempre sé lo que quiero escribir y dispongo de una estructura, pero este libro comenzó con cuatro personajes y ha terminado con más de 40».
Jesús Gallardo presentó 'El beso' ayer por la tarde en el salón de plenos de la Diputación provincial. El autor estuvo arropado por la periodista Mar Illán y el escritor Faustino Lara, miembro del Grupo Literario Arrendajos, del que el autor fue cofundador. La presentación aportó un nota muy original que no suele darse en estas citas literarias, una actuación teatral por sorpresa basada en la novela que aportó frescura y ayudó a poner imágenes a esta nueva historia.
«Siempre pensé que mi mejor novela sería 'Nunca el olvido', la anterior, sobre todo, por el tema que traté de la trata de mujeres, pero me he dado cuenta que 'El beso' la supera en madurez». El autor está tan convencido de ello que esta vez no ha dejado leer su novela a nadie hasta que se ha editado, algo inusual porque la creación literaria suele necesitar compartirse antes de dar por finalizado el proyecto.
Realismo mágico. La novela transcurre al ritmo de la vida de Esmeralda, nacida en plena guerra y en el Alcázar de Toledo, a pesar de que el nombre se camufle, y de su madre. El autor calcula que un tercio de la novela se ambienta en la Guerra Civil y en la posguerra, pero la mayor parte de la trama transciende a estos dos importantes y cruentos periodos históricos.
Gallardo se ha inspirado en muchos hechos históricos ocurridos en distintas localidades y ha logrado con acierto trasladar el asfixiante ambiente de aquella época, la invisibilización de la mujer, la impunidad de una sociedad patriarcal y las dificultades diarias de la protagonista. Pero también se ha acercado al realismo mágico con el don de soñar el futuro que comparte la protagonista y el baile de nombres para camuflar localizaciones reales que ayudan a contextualizar esta historia dramática que invita al lector a emocionarse en muchos momentos.
«La novela cuenta con un trabajo de documentación muy intenso, pero mi intención no es que puedan abrirse viejas heridas relacionadas con la Guerra Civil y la posguerra», explica Gallardo, uno de los motivos por los que en su libro no hay referencias al bando nacional, sino a «los guardianes del régimen», ni a los republicanos, llamados «ciudadanos de la libertad».
La estructura de la historia también es singular. El autor desgrana ya en la primera página buena parte de la trama y consigue hacer «spoiler de la novela» en sus páginas. En este caso, la trama se hilvana como si se tratasen de tres novelas distintas: la estancia en la residencia de mayores de Esmeralda, otra centrada en los sueños de la protagonista, y una última que narra su vida en orden cronológico.
En esta línea, 'El beso' también se encuentra con tres narradores. El que cuenta la vida de Esmeralda, otro en segunda persona centrado en los últimos años de la protagonista, y un tercero que usa la primera persona para narrar los sueños de la protagonista.
El autor ya cuenta con alguna idea para su siguiente proyecto. Jesús Gallardo suele inspirarse en noticias reales para tejer las tramas de sus novelas. «La realidad es la mejor ficción», comenta. Y no le falta razón porque esta quinta novela surgió de una noticia que le sorprendió y emocionó en su momento. «Una mujer mayor estaba en una residencia y quería que le trasladaran a otra para cuidar a su hijo con alzheimer».
Con estos mimbres, el periodista fue madurando poco a poco la idea y decidió dar forma a Esmeralda, su gran protagonista, una gran soñadora en constante y desgarradora búsqueda.