Un total de 83.000 litros de agua han sido distribuidos en las dos últimas semanas en cisternas por el Ayuntamiento de Talavera a trece municipios de la comarca que han necesitado de agua tras verse afectados por la dana. El alcalde, José Julián Gregorio, destacó que la ciudad ha vuelto a demostrar su solidaridad con las localidades que así lo reclamaron, después de sufrir los desperfectos ocasionados por las intensas lluvias y no contar con el consumo de agua tras la rotura de la tubería de Picadas.  

Gregorio, acompañado por el concejal de Servicios Generales, Benedicto García, ha visitado las instalaciones municipales de Servicios Generales, agradeciendo a sus trabajadores el trabajo realizado para que el agua pudiera llegar a las localidades necesitadas.

En este sentido, lamentó las personas que han perdido la vida como consecuencia de la dana y mostró la unión fraternal entre Talavera y su comarca, que se convierten en una sola cuando es necesario. «No dudamos en ningún momento cuando se nos pidió desde la Junta de Comunidades de Castilla La Mancha en ayudar a aquellos que lo estaban necesitando», indicó Gregorio, quien añadió que los municipios no han sido únicamente de las tres comarcas talaveranas, sino que se ha llegado también a la zona de Torrijos. «Estos municipios lo estaban pasando mal, y además ha pasado cuando muchos celebraban sus fiestas», añadió.

En concreto, y según detallan desde el Consistorio, se ha estado abasteciendo por medio de cisternas a las siguientes poblaciones: Domingo Pérez, Erustes, Garciotum, Gerindote, Los Cerralbos, Lucillos municipio y también en la urbanización Kiem, Nuño Gómez, Aldea en Cabo, Almorox, Nombela, Paredes de Escalona y Pelahustán.

De ellos, 222.000 litros se han distribuido con las dos cisternas que ha aportado el Ayuntamiento de Talavera a las localidades que carecían de ellas, y 111.000 litros con cisternas enviadas desde Picadas. Por otro lado, la cisterna de Morillo ha llevado 520.000 litros para la localidad de Castillo de Bayuela.

Gregorio insistió en la solidaridad de la ciudadanía y el trabajo de sus operarios de Servicios Generales para llevarlo a cabo, así como la buena disposición de Aqualia, empresa concesionaria del agua en la ciudad, que colaboró de la mejor manera desde la Estación de Tratamiento de Agua Potable (ETAP).

Operarios. El concejal de Servicios Generales acompañó al alcalde y agradeció en persona la labor de sus  trabajadores, «que no acaba aquí sino que ahora empiezan las ferias», dijo. Se dirigió especialmente a los conductores, ya que «aunque cuentan con una dilatada experiencia hay que reseñar que han estado día tras día en carretera, recogiendo y llevando agua a diario en turnos de mañana, tarde e incluso de noche, haciendo horas extra», en camiones cisternas con una capacidad de 12.000 y 8.000 litros respectivamente.

Esta acción finalizó cuando se restableció el abastecimiento de agua mediante el sistema de Picadas, cuya rotura afectó a más 149.000 personas de diferentes  localidades de la provincia.

Benedicto García mostró su orgullo por los trabajadores. «Tenemos que presumir de trabajadores municipales, entre otras muchas cosas buenas que tiene Talavera», dijo.

Se trata de un ejemplo más de la colaboración y apoyo mutuo que siempre ha existido entre Talavera y los pueblos de su comarca, que en este caso se ha extendido más allá de las fronteras naturales. Por ello, el concejal de Servicios Generales, agradeció al alcalde talaverano «por el apoyo que siempre ha mostrado hacia la comarca y que sigue mostrando ahora como alcalde de la ciudad».

«Talavera no es nada sin su comarca y la comarca no es nada sin Talavera, y en estos momentos difíciles es cuando tenemos que estar todos juntos, tirar para adelante y superar todo lo que venga», finalizó.