Unas 450 personas se han concentrado esta mañana de miércoles ante la delegación provincial de Educación para pedir menores ratios en las aulas y menores cargas lectivas, en definitiva, que el presidente regional, Emiliano García-Page, acabe de una vez con los recortes de su antecesora, María Dolores Cospedal «que nos sitúan en el furgón de cola de la educación». Lo han hecho en una jornada de huelga cuyo seguimiento no ha estado muy claro. Según Educación, han parado en la provincia de Toledo 164 profesores, es decir, un 1,35 por ciento de la plantilla, y en Castilla-La Mancha un 1,46 por ciento. Según los tres sindicatos convocantes, Csif, STE y CCOO, solo en la jornada de mañana habían parado 3.000 profesores en Toledo, lo que supone un 31 por ciento, y 7.000 en el conjunto de la región, es decir, un 36 por ciento.

Así lo exponía Pedro Viejo, portavoz de STE-CLM, quien valoró positivamente los resultados, que animan a los sindicatos a seguir movilizándose hasta que la Consejería revierta los recortes. Porque, criticó, la «cronificación de los recortes que se hicieron en la etapa de Cospedal, que a día de hoy siguen vigentes y hacen que estemos en el furgón de cola de la Educación de todo el país».

Por su parte, Rubén Gómez, de Csif Toledo, criticó que «el Gobierno regional, después de doce años y con 12.000 millones de presupuesto, ha sido incapaz de revertir los recortes de Cospedal. Page ha convertido los presupuestos de Educación en indefinido». La consecuencia son los actuales ratios, la excesiva carga lectiva y el incremento de la carga burocrática, que «han supuesto una sobrecarga del profesorado, que realiza a día de hoy más labores administrativas que de enseñar y educar», de forma que hay un detrimento de la calidad en la Educación «como demuestra el informe PISA, que coloca a la educación castellanomanchegas a la cola de las regiones europeas». No solo eso, sino que en este contexto, se solapan el cierre de centros públicos, destrucción de plantilla y cierre de centros nocturnos, con un aumento de la financiación de centros de educación concertada, «que se blinda cinco años, en detrimento de la pública».

La huelga de Educación deja datos muy dispares de seguimientoTodo ello, criticó Gómez, se está haciendo «con el beneplácito de ANPE y UGT, que se consideran los sindicatos traidores de los trabajadores del sector público educativo».

Peticiones. Los sindicatos reivindican la bajada de horas lectivas (a 18 y 23 horas lectivas en EEMM y Maestros respectivamente, con el consiguiente aumento de horas complementarias para atender todas las tareas que requiere la profesión), reducción de la carga lectiva para mayores de 55 años sin perdida de retribuciones; la contratación y cobro del periodo de verano para el personal interino; bajada de las ratios máximas: 15 alumnos en infantil, 20 en primaria, secundaria y ciclos de FP, 25 en Bachillerato y 12 en FPB; bajada de ratio para el alumnado vulnerable tanto con informe como sin informe, cuando ha habido un incremento de más de 9.000 alumnado en el periodo 11/12 al 22/23; y la disminución de toda la burocracia que cada vez mas se ha ido incrementando en los centros.

Margarita Alvarado, representante de la Federación de Enseñanza de CCOOse felicitó la defensa de la dignidad y los derechos de la Ecuación pública que ha supuesto la huelga. Una huelga en la que los sindicatos mayoritarios, que suponen el 60 por ciento de la representación sindical de la Educación en la región, exigen a la Junta que se comprometa en la Mesa Sectorial antes del cierre del presente curso «a dar la presupuestación y cómo se van a abordar estas mejoras».

La huelga de Educación deja datos muy dispares de seguimientoTambién quieren los sindicatos, reiteró, un avance en la reducción de la burocracia, «porque el profesorado está agotado y no podemos dedicar el tiempo a la calidad de la enseñanza». Por ejemplo, las maestras de Infantil «no tienen apoyos, no tienen tiempo real para preparar todos esos recursos que necesita esa fase tan importante». Así ocurre en Secundaria, FP, Conservatorio, Escuelas de Arte, Escuelas de Arte... «todos están con la misma casuística». Además, el curso pasado acabó con la tarea añadida de gestionar los bancos de libros, «lo que nos ha parecido una tomadura de pelo».

Insistió también Alvarado en las «ratios excesivas, que exceden la comparativa con cualquier comunidad». Recordó que la región, y en concreto Toledo, tienen aumentos de matriculaciones, «no son ciertos los datos de matrícula que se están aportando». También han de entrar en el cómputo los alumnos que necesitan atención específica, que ha subido considerablemente.

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