El Banco de Libros puesto en marcha por la Junta de Comunidades es la gran novedad este año en 'la vuelta al cole' en Toledo y Castilla-La Mancha, una región por otro lado que se viene manteniendo año tras año entre las más baratas. De forma que, apunta Itziar Fernández, delegada de la OCUen la región, supone un ahorro para las familias en el gasto de libros.
Hay que tener que, según los datos de la OCU, este curso el gasto medio en libros de los alumnos de Infantil asciende a 147 euros, 205 en Primaria, 224 en Secundaria y 253 en Bachillerato. Esta inversión se podrá aminorar, sobre todo, en los centros públicos, donde el Banco de Libros es de obligada aplicación, mientras que en los concertados es voluntaria.
Cierto es, apunta Fernández, que el pasado curso en la región ya había una ayuda de libros «aunque era por renta de unidad familiar y ahora el Banco de Libros es para todas las familias cuyo centro está adherido». Un Banco de Libro funciona por lotes, un niño entrega el lote completo del curso anterior y recibe el del presente. Aunque, apuntan desde OCU, la iniciativa tan solo acaba de comenzar, y muestra algunas peculiaridades, como el que son los profesores los que evalúan el estado de los libros y si alguno está dañado, su familia tendrá que pagar veinte euros para adquirir el lote completo.
A nivel estatal, este año la vuelta al cole le supondrá a las familias un trece por ciento más que durante el año anterior, es decir, pagarán de media unos 2.588 euros por hijo, frente a los 2.189 del pasado curso, unos cuatrocientos euros más que el año anterior, según se desprende de la encuesta realizada por la OCU entre sus socios. Solo los gastos de equipación para la vuelta al cole (entre libros, material, uniforme...) pueden suponer más de 500 euros por alumno de coste medio, a lo que hay que unir a lo largo del curso las actividades extraescolares, AMPA y comedor e incluso desayuno, entre otros. Cierto es que en Castilla-La Mancha es una de las comunidades donde 'la vuelta al cole' sale más barata. A falta de datos este curso, el anterior era junto a Castilla y León una de las más baratas (con 1.100 euros hace doce meses).
Como cada año, OCU ha realizado nuestra encuesta anual de gastos escolares, una muestra aleatoria de socios con hijos en edad escolar, con cuyas respuestas la entidad conoce qué supone la vuelta al cole para la economía familiar. En esta ocasión respondieron 917 socios con hijos entre 3 y 18 años que van a cursar estudios desde Educación Infantil a Bachillerato durante este curso 2024/2025.
Tipo de centro. Esta encuesta detecta de nuevo grandes diferencias en función del nivel de estudios y, sobre todo, el tipo de centro en el que estudien los alumnos. Diferencias muy grandes entre la educación pública, concertada y privada. El gasto anual puede ir de 1.200 euros de media por hijo en un centro público, a casi 8.000 de media en un centro privado. Entre ambos extremos están los que van a un centro concertado, donde de media gastarán 3.396 euros. A este tipo de centro van el 38 por ciento de los estudiantes de la encuesta. El 54 por ciento acude a un centro público y solo un 8 por ciento de nuestros encuestados va a un centro privado.
Es el importe de la matrícula y el de las cuotas mensuales (o aportaciones voluntarias) lo que explica las grandes diferencias entre unos centros y otros: mientras que en la educación pública no existe este gasto, en un centro concertado supone un gasto medio de 1.346 euros y alcanza los 5.646 euros en un colegio privado. En mucha menor medida el comedor o las clases extraescolares incrementan el gasto. Hay por ejemplo unos pagos en las asociaciones de madres y padres en privados y concertados muy por encima de los públicos. En estos también suelen ser más caras las actividades extraescolares.
Pero, destaca Fernández, la partida que más ha aumentado este año es el de las actividades extraescolares, «porque, cada vez más, prácticamente todos los encuestados al menos llevaban a una actividad a los menores, muchas veces por necesidad de ampliar el horario lectivo, con el coste que eso supone», una media de sesenta euros por actividad y niño al mes, aunque el inglés, por ejemplo, ronda los ochenta euros.
Estudios. También el nivel de estudios que se vayan a cursar es determinante en el gasto. La vuelta al cole de los niños más pequeños, con más gastos fijos, y de los alumnos de bachillerato sale en general más cara que la de los estudiantes de secundaria, de forma que el gasto previsto por niño en Infantil es de 2.727 euros, en Primaria de 2.650, en ESO de 2.350 y en Bachillerato de 2.970. Pero hay diferencias significativas según el tipo de centro. En los públicos, quienes más gasten serán los que estudien primaria (de media 1.411 euros por alumno). En los centros concertados es la enseñanza Infantil la que implica el mayor gasto (3.720 euros de media al año), los alumnos más mayores gastan algo menos en conjunto. En los centros privados en cualquier nivel se superan los 7.000 euros anuales de gasto.
También el lugar de residencia marca diferencias y como en anteriores ocasiones, la vuelta al cole es más gravosa para las familias madrileñas que, según revela nuestra encuesta, de media gastarán bastante más por cada alumno que en otros lugares: el gasto total medio por estudiante asciende nada menos que a 3.422 euros, el doble de lo que se gasta en Andalucía (1.717 euros) o Castilla y León (1.799 euros). La media en la Comunidad Valenciana y Cataluña supera ligeramente los 2.700 euros (2.725 y 2.708 euros, respectivamente), y en el País Vasco es de 2.291 euros, algo por debajo de la media española, que este año supera los 2.500 euros por alumno.
Ayuda. La encuesta de la OCUconcluye además que «las familias necesitan ayuda». Porque «volver al cole en este entorno de precios disparados puede convertirse en una dura carga para muchos hogares españoles que, como sabemos, ya están teniendo muchos problemas para afrontar sus gastos cotidianos».
Según sus datos, en tres de cada cuatro hogares se vive al día. Entre el 76 y el 88 por ciento de los hogares con niños tiene «algunas o muchas» dificultades económicas. Un 12 por ciento tiene dificultades para afrontar la educación primaria o secundaria. Un 20 por ciento no puede afrontar los gastos de actividades extraescolares. Un 25 por ciento no puede pagar libros, dvd, etc. Un 40 por ciento tiene dificultades para comprar ropa o accesorios.
De forma que «desde OCU insistimos en que es preciso ampliar las ayudas para las familias en condiciones de mayor vulnerabilidad».