La asamblea extraordinaria del Cobisa Futsal llegó a una gran conclusión: nadie quiere irse de Cobisa. Los socios de derecho y los socios colaboradores (unos 60) llegaron a esta conclusión después de poner encima de la mesa los nueve años de historia, en los que el conjunto aurirrojo no ha dejado de mejorar sus resultados deportivos, económicos y sociales.

¿Qué hay que hacer para que el Cobisa pueda seguir creciendo aquí? ¿Qué herramientas tenemos para poder crecer? ¿Qué emana en realidad de Cobisa para que os mantengáis aquí con otras ofertas? ¿Qué soluciones hay a las deficiencias en las instalaciones? A estas preguntas, las respuestas fueron variables, pero la principal fue: «No, no nos queremos ir de Cobisa».

Pero ahora mismo, la pelota está en el tejado de la administración local y entidades y empresas locales y socios colaboradores, ya que al club toledano se le presenta un futuro prometedor, o bien de muerte por éxito o de mudanza.

Así las cosas, hay prevista una próxima reunión con el Ayuntamiento para exponer decisiones importantes, después de su compromiso para realizar las mejoras exigidas en lo que se pueda y deba para seguir con sede en el municipio. Principalmente, se trata de la ampliación de un pabellón que se ha quedado obsoleto y nada acorde a la trayectoria actual.

Fue una asamblea cordial y con preguntas y respuestas claras a las que solo el tiempo dará o quitará razones. La primera en intervenir fue la presidenta del club, Yolanda Gómez, mientras que también tomaron la palabra el tesorero, Jesús Mario Martín, el vicepresidente, José Antonio Fernández-Marcote, y el entrenador, Quique Soto. Danny Núñez, como escribano, y Rafael Vargas, realizaron las labores de intendencia.

En esa media hora de intervención se tocaron todos los frentes que tiene abiertos el Cobisa Futsal: presupuesto, instalaciones y funcionamiento del club. Además de los socios, patrocinadores y colaboradores, también asistieron concejales, entre ellos el titular de Deportes del consistorio cobisano, Ángel Benito.