La provincia de Toledo ha registrado 203 delitos contra la libertad sexual en los nueve primeros meses del año recién finalizado, un dato que incrementa en un 31,8% los 154 casos relacionados con esta forma delincuencial que se constataron entre enero y septiembre de 2022. El aumento relacionado con este conjunto de atentados contra la intimidad personal se manifiesta tanto en el tipo más agravado, el de la agresión sexual con penetración, como en el resto de casos.
Las violaciones consumadas se disparan un 57,7% hasta el noveno mes de 2023 respecto a los tres primeros trimestres del año anterior. En el periodo comprendido entre enero y septiembre de 2022, los cuerpos policiales anotaron 26 casos; en los mismos meses del año recién finalizado han sido 41 las agresiones sexuales en las que ha mediado acceso carnal. El dato también incluye los casos de abusos sexuales con penetración.
En el capítulo del resto de delitos contra la libertad sexual, un grupo en el que se añaden, entre otros, la agresión sexual, el acoso sexual, el exhibicionismo o los delitos relativos a la prostitución, la explotación sexual o la corrupción de menores, también se observa un preocupante despegue de la incidencia. En esta categoria de amplio espectro delictivo se han registrado 162 crímenes, un 26,6% más que los 128 de los nueve primeros meses de 2022.
La gran parte de estos actos atentatorios contra una de las dimensiones de la dignidad humana son sufridos por mujeres. La evolución cuantitativa de este conjunto de crímenes en los meses más recientes refleja un lamentable aumento. Entre enero y septiembre de 2017, los hechos relacionados con este capítulo delictivo en la provincia ascendían a 110 casos, poco más de la mitad de la cifra del último recuento realizado. Además, se conocieron nueve agresiones con penetración frente a las más de cuatro decenas acumuladas en el mismo periodo de 2023. En los tres primeros trimestres de 2016, primer año en el que se ofrecieron estos datos parciales, la cuantía en ambos indicadores para la provincia fue aún menor: siete violaciones consumadas y otros 82 delitos.
DATOS POR CIUDADES. La estadística que ofrece el Ministerio del Interior a partir de los datos de los cuerpos policiales aporta cifras concretas de las cuatro localidades de la provincia con más de 20.000 habitantes. Así, de los algo más de dos centenares de delitos sexuales registrados entre enero y septiembre de 2023, se han producido 29 en Talavera, 18 en Toledo, 13 en Seseña y 12 en Illescas. Destaca la diferencia entre las dos principales ciudades de la provincia, dado el similar tamaño de población con que cuentan. En el caso de Talavera, además, se constata un repunte del 31,8% (el mismo porcentaje que se contempla en el conjunto de la provincia), pasando de los 22 pretéritos a los 29 de la revisión más actualizada. El aumento de casos en la capital regional es algo menor: de 15 a 18 delitos, un alza del 20%.
El mayor aumento en términos relativos se produce en Illescas, donde la frecuencia de este tipo de crimenes sube un 50% en el último año, de ocho a 12 delitos. En Seseña, por su parte, se mantienen las mismas cifras respecto al periodo con que se establece la comparación.
En el caso de las agresiones sexuales con penetración, se han acumulado ocho en Talavera (seis más que entre enero y septiembre de 2022), cinco en Toledo (tres más), dos en Seseña (dos menos) y una en Illescas (la misma cifra).