La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, acusa al Gobierno central de intentar «dejar» a la región capitalina «sin aviones de corta distancia», una advertencia que sume en la duda al proyecto de construcción de un nuevo aeropuerto en la localidad toledana de Casarrubios del Monte. El plan para convertir el actual aeródromo sagreño en el futuro Madrid Sur, una infraestructura que trata de descongestionar el tráfico aéreo en Barajas, cuenta con el respaldo de las administraciones regionales madrileña y castellano-manchega y el apoyo de las patronales empresariales a uno y otro lado de la linde autonómica. Ayuso lamenta la «obsesión» del Ejecutivo de Pedro Sánchez contra Madrid, una actitud que la presidenta autonómica contrapone con el comportamiento del Gobierno con otras comunidades. «Nos quieren sin trenes, sin inversiones, sin industrias y sin empresas», subrayó en un desayuno informativo de Europa Press.
El aeropuerto proyectado, una dotación para la que se requiere la ampliación del actual aeródromo, es propiedad de la empresa Air City. La intención de sus promotores es convertir a este punto en una base habitual de vuelos domésticos y otros enlaces internacionales de proximidad. A través de la actividad en Casarrubios, enfocada también a aerolíneas de bajo coste y radio cercano, Barajas reforzaría su condición de hub internacional. El viejo aeropuerto, el único de carácter civil que opera en Madrid, ejerce como un gran nudo de conexiones entre el norte de África, América del Sur y Oriente Próximo.