El Consejo de Ministros ha culminado este miércoles el nombramiento de Álvaro García Ortiz como fiscal general del Estado, después de haber pasado por los trámites previos de consulta en el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), que no le avaló, y en el Congreso, que sí lo hizo.
El pasado 30 de noviembre, el CGPJ consideró, por primera vez en democracia y con los votos del sector conservador, que el candidato propuesto por el Gobierno no era el idóneo para renovar su cargo, aunque con un solo voto de diferencia sobre los que sí le apoyaron.
Tres semanas después, el 21 de diciembre, García Ortiz sí paso el examen de idoneidad al que se sometió para revalidar su cargo ante la Comisión de Justicia del Congreso.
Fiscal de carrera desde 1998, García Ortiz ha ejercido en diversos destinos, como en la Fiscalía de Área de Santiago de Compostela, en el Tribunal Superior de Justicia de Galicia, en el Tribunal Supremo y en la Secretaría Técnica de la Fiscalía General del Estado.
Ha impartido cursos de Derecho Ambiental, en el que está especializado, y participado en diversas ponencias internacionales, como el Seminario de investigación medioambiental en Venezuela o la Conferencia internacional sobre cambio climático COP 25 en Chile-Madrid.
Entre otros reconocimientos, ha recibido Premio Ríos Vivos 2010, concedido a la Fiscalía de Delitos Ambientales del Tribunal Superior de Justicia de Galicia, las medallas al Mérito de la Guardia Civil y la del Cuerpo Nacional de Policía, además de la Cruz distinguida de primera clase de la orden de San Raimundo de Peñafort.