No hay precedentes. Tampoco hay manera de calibrar las diferencias. Afloran los nervios y la expectación. El CD Toledo no sabe lo que se va a encontrar el domingo (12:00 horas) en el Power Horse Stadium en el encuentro de ida de la final nacional de los 'playoff' de ascenso a Segunda Federación. Pero va a intentar mostrar su identidad. La que le ha traído hasta aquí en esta temporada serpenteante.
El equipo de Rubén Gala se siente ahora fuerte, con capacidad para plantarle cara a cualquiera que se ponga enfrente, y el filial rojblanco, aunque asusta, no se le tiene ningún miedo. El gran inconveniente puede ser el estado físico de los futbolistas nucleares del once inicial, aunque parece que todos van a jugar, aunque sea infiltrados.
Así las cosas, la única baja confirmada es la del delantero Gabri, que podría llegar al encuentro de vuelta en el Salto del Caballo. Por tanto, hay muchas posibilidades de presentar en el césped del estadio Juegos del Mediterráneo (para los tradicionales y románticos) el equipo de gala de Gala.
El técnico palentino halló petróleo con los extremos laterales, y, salvo que Chupi no esté recuperado, lo volverá a poner en la izquierda, con Angelito en la derecha. Los centrales tiene pinta de que serán Iván González y Kupen, aunque ahí está Ramón para entrar en caso de que sea necesario.
Por delante, Theo García, con su tobillo lastimado, será el ancla del CD Toledo, con Rodri como acompañante. Piochi estará en la banda izquierda y Unax llevará el peso del ataque por la derecha, como es prácticamente habitual. La gran duda es cómo estará Pepe Delgado, pero ahora mismo resulta tan imprescindible, que es preceptivo que juegue junto a Manu Gavilán en la punta del ataque.