El Estado activa los pozos de emergencia en Las Tablas

Ana Pobes / EFE
-

No llueve y el parque necesita agua, pues a fecha de 1 de noviembre el humedal solo tenía 22 hectáreas con agua de las más de 1.800 que conforman la superficie encharcable

El Estado activa los pozos de emergencia en Las Tablas - Foto: Rueda Villaverde

La Comisión Mixta de Gestión de los Parques Nacionales de Castilla-La Mancha ha acordado esta semana poner en servicio los pozos de sondeo de emergencia del Parque Nacional las Tablas de Daimiel, ante el proceso de degradación de sus turbas, que podría dar lugar a su autocombustión. La activación de la batería de sondeos de emergencia se lleva a cabo tras recabar la pertinente autorización especial de bombeo a la Confederación Hidrográfica del Guadiana (CHG). 

El objetivo de esta medida es garantizar la humectación de una parte del paquete de turbas del parque nacional, con objeto de evitar el riesgo de autocombustión espontánea que de forma natural puede originarse en estos ecosistemas, ya que el objetivo es mantener húmeda la zona de turbas y evitar que se incendien. A fecha de 1 de noviembre, el humedal tenía solo 22 hectáreas encharcadas de las más de 1.800 que conforman la superficie encharcable, según los datos del Informe de Sequía de la Confederación Hidrográfica del Guadiana (CHG).  

El Organismo Autónomo Parques Nacionales es el responsable de la gestión de la batería de sondeos de emergencia y hará un seguimiento sobre su efectividad. 

El humedal manchego está atravesando por una situación difícil debido a la sequía de los últimos siete años, la más grave y larga por la que pasa España desde el año 1995. No llueve y el parque necesita agua. Para su supervivencia, de no llegar las precipitaciones, solo hay dos alternativas: un trasvase desde los pantanos de cabecera del Tajo-Entrepeñas y Buendía o la utilización de los pozos de recarga. El Ministerio de Transición Ecológica considera que esta última es la «mejor solución» y recuerda que la última vez que se realizó un trasvase al parque fue en el año hidrológico 2008/2009 y de los 20 hectómetros cúbicos derivados solo llegaron a su destino 0,75.

No es la primera vez que la batería de sondeos de emergencia se pone en marcha para tratar de conseguir encharcar Las Tablas, pues en marzo de 2020 se llevaron 5,75 hectómetros cúbicos al parque en dos meses. A partir de octubre de ese mismo año se bombearon otros 5,75 hectómetros cúbicos con la llegada del nuevo año hidrológico. Y en mayo de 2021, el agua bombeada al parque a través de los pozos fue de más de 230.400 metros cúbicos. 

Los ecologistas lo ven bien. Las ONGs ecologistas del Patronato del Parque Nacional de Las Tablas de Daimiel ven «bien» la activación de los pozos de emergencia para evitar que se registre un incendio de turbas si entran en autocombustión. Así lo ha expresado el representante de las ONGs Rafael Ubaldo Gosálvez Rey tras la decisión de la comisión mixta de Gestión de los Parques Nacionales de Castilla-La Mancha. Comenta que la zona que ahora se va a inundar es en la que se registraron mayoritariamente los incendios de 2009, donde se llevó a cabo un importante trabajo de compactación del terreno pese a lo cual no sería raro que pudieran entrar en autocombustión las turbas dada la precaria situación ambiental en la que se encuentra el parque.

Por otro lado, ha señalado que la medida de inundar la zona también puede responder al interés de proteger el histórico Molino de Molemocho, donde, según se informó en la última reunión del Patronato, han aparecido importantes grietas que pueden afectar a su estructura.