El CD Illescas volvió al trabajo este martes con cara de líder. Para el central Adrián Chaves, ir a entrenar «con una sonrisa» y salir «reventado, pero con la misma sonrisa», es uno de los secretos de la asombrosa trayectoria del cuadro toledano. ¿La otra? El trabajo diario.

«Cada jugador tiene una información increíble, con el objetivo de que todo esté mecanizado y sepamos lo que debemos hacer durante el partido», cuenta el defensor. Es más, desvela que, «el día después de cada encuentro, el míster nos va diciendo lo que hemos hecho mal a cada uno; es un trabajo que no tiene nada que envidiar a equipos de Segunda División, y ni siquiera lo he viví cuando estuve una pretemporada con Iriondo en el Rayo Majadahonda».

Evidentemente, Chaves defiende el modelo de su entrenador, Pablo Nozal, a pesar de que admite, en tono de broma, que «no es fácil llevarlo». Es por eso que al CD Illescas le costó encajar los mecanismos en las primeras jornadas. «A pesar de mantener el bloque, llegó gente nueva en todas las posiciones, y no es sencillo adaptarse a un estilo tan marcado, pero el trabajo ya va dando sus frutos», añade el futbolista.

El madrileño detecta que ahora los rivales no los miran como hace dos meses. «La atención que nos prestan y cómo nos analizan ha cambiado; no es fácil jugar contra nosotros», agrega. Por eso, cree que ahora mismo «el Illescas se ha ganado un respeto en la categoría».

En la cúspide del Grupo 5 de la Segunda Federación, Chaves también confiesa que «la palabra 'líder' no se ha escuchado todavía en el vestuario». Considera que la temporada es «una carrera muy larga» para la que el equipo sagreño «no está hecho», y sí el Sanse, el Badajoz, el Numancia o el Talavera. «Estamos compitiendo contra presupuestos abismales», defiende.

Así que la consigna es «disfrutar y disfrutar porque el fútbol es muchas veces injusto, y a saber cuándo podremos vivir algo así de nuevo». Para el central, está en un segundo plano irse a Navidad en la primera plaza, algo que se certificaría con un empate en el estadio Príncipe Felipe ante el CP Cacereño. «Intentaremos ganar, como siempre, en realidad, acabemos el año primeros o segundos, será un 2023 inolvidable, en el que no esperábamos vivir un ascenso en Cantabria y estar líderes en diciembre», concluye el jugador.

Por eso, prefiere que la locura esté en el lado de la afición. «Ellos sí que se lo creen, pero nosotros debemos estar en otra onda», insiste Chaves, que reconoce que en el campo están detectando esa ilusión máxima de la afición por una campaña histórica. «Van donde sea, a Cobeña a Cáceres, haga la temperatura que haga», admite.