Un encuentro casual, un flechazo y una historia de amor que ha llamado al escritor Fernando Novalbos a escribir una novela con rapidez, en solo dos meses y medio. 'Todo es aire menos tú' acaba de publicarse de la mano de 'Esstudio Ediciones' y promete una historia de encuentro y desencuentro que promete un flechazo poético.

Las almas gemelas existen para este escritor moracho que se embarcó hace tiempo en una historia de amor de una exquisita belleza que cuenta con dos ingredientes fundamentales que engancharán a los lectores, la amistad y la conexión que puede darse entre dos personas, Mía, una estudiante de violín y Hernán, el otro protagonista que ofrece coloquios de cine en el Ateneo. Dos personas«que coinciden entre tanta gente».

Novalbos tenía varias novelas ya escritas, pero se ha decantado por 'Todo es aire menos tú' en primer lugar por la importancia «de encontrar esa mirada» a través de la prosa poética, de lo que piden cada uno de los personajes en una historia que toca los sentimientos e imbuye al lector en una lírica que inunda tantas y tantas páginas, aderezada con cierto dolor y melancolía. 

El escritor Fernando Novalbos - Foto: LT«Es una novela muy completa, muy sensible y de prosa poética», explica el autor, convencido de que su decimoctavo libro puede atraer al público joven. Necesitaba aprovechar el tirón de la prosa poética tan de moda gracias a la premio Nobel de Literatura de este año, la escritora surcoreana Han Kang, y su obra que relata traumas históricos. 

Novalbos saca al mercado editorial este nuevo proyecto, que podrá adquirirse en Todostuslibros.com, en la página de la editorial y en Amazon Books, que disfruta ya de elogios especiales, como el de la crítica literaria Ana García de Polarvieja, encargada de corregir esta novela a la que califica «como un ejemplo de la mejor prosa poética que he conocido jamás».

Polarvieja también ha prologado 'Todo es aire menos tú' con una dedicatoria muy especial hacia el autor, porque considera que ha dado con «una obra maestra de la literatura». La crítica literaria tiene claro que cualquier lector que se acerque a la novela de Novalbos no podrá dejar de leerla hasta el final.

El escritor ha tenido que tener paciencia para publicar su novela a pesar de haber escrito 240 páginas prácticamente en dos meses y medio, ya que el ejercicio de corrección le llevó tiempo, le obligó estar encima «de los pequeños detalles». 

Una tarea para pulir el texto que le dio mucho trabajo. Además, tuvo que comprometerse por escrito a no publicarla durante un tiempo por presentarse a un concurso literario.

Gesto solidario. Novalbos ha dado a cada personaje lo que le pedía. «No hay nada que ocupe mi tiempo que encontrar esa mirada», apunta satisfecho con este nuevo proyecto cuyos beneficios se destinarán a los damnificados de la DANA en Valencia y en Castilla-La Mancha. La idea surgió «de improviso» tras conversar con un amigo que le invitó a tener este gesto altruista con las ventas.

Novalbos tiene otras tres novelas pendientes de publicar, dos de ellas tituladas 'El dispensador de agua' y 'El pentagrama silencioso'. De momento, toca dedicarse a la recién publicada. 

El amor es una constante en su biografía literaria, como ya demostró hace tres años con la novela corta 'El niño que contaba con dar un abrazo a su padre', escrita en plena pandemia de covid y el libro de poemas que remató poco después. Una musicalidad que caracteriza a un autor prolífico que sabe transmitir sensibilidad y emociones a los lectores que se acercan por primera vez a sus novelas o ya han tenido la oportunidad de leer su cuidada prosa.