Castilla-La Mancha le declara la guerra a la soledad. El presidente de la Junta, Emiliano García-Page, ha presentado hoy la primera 'Estrategia regional contra la Soledad no Deseada'. "Esta estrategia significa que no nos conformamos con lo que tenemos", apunta. Es más, quiere que se haga también una estrategia a nivel nacional y así se lo trasladará a los ministerios competentes con el objetivo de que se pueda elaborar en 2024.
En el caso de Castilla-La Mancha la estrategia pondrá a disposición de esas personas que viven solas toda la red de recursos que tiene el Gobierno, como la ayuda a domicilio, esto es, personas que acuden a las casas para ayudar con las tareas domésticas o el aseo de esa persona, o bien la teleasistencia, que es ese servicio de llamadas y atención telefónica que ahora se va a volver a contratar por 40 millones durante cuatro años más y así se llegará a 90.000 personas. También se trabajará con los servicios sociales, con la atención sanitaria y con las actividades que hacen los centros de mayores y los servicios SEPAP de promoción de la autonomía y envejecimiento activo, que abarca desde la atención psicológica a la promoción de estilos de vida saludables.
"Hay muchísimos recursos, me siento orgullosísimo de la inmensa red de servicios sociales, que tenemos también conveniados con los ayuntamientos y el Estado", presume Page, que hace hincapié precisamente con los SEPAP. "Han tenido una repercusión verdaderamente extraordinaria y con un coste módico, que no desbarata ningún presupuesto", apostilla.
La clave de la nueva Estrategia es que se coordinan todos estos recursos para llegar a las personas que se sienten solas. La clave está ahora en la detección de este problema. La presidenta de la Fundación Pilares para la Autonomía Personal, que ha trabajado en esta estrategia, cuenta cómo funcionará. Pilar Rodríguez avanza que han diseñado un instrumento, que podrán utilizar los trabajadores de servicios sociales "con una escala corta y fácil de aplicar con la que pueden detectar situaciones de soledad".
Rodríguez destaca que es necesario coordinarse y "no que cada servicio de manera aislada vea cómo lo hace". También subraya que es crucial que la sociedad empieca a trabajar con este objetivo en mente y por eso habla tanto de la necesidad de "tejer redes". "Toda la sociedad entera tiene que ser consciente de que este problema existe y tiene remedio", insiste. Por eso pide implicación si alguien ve que una vecina suya apenas sale de casa o si un amigo deja de ir al centro de mayores. "Las redes son las que nos salvan", abunda, "somos seres sociales, vivimos en comunidad y hay que trabajar en esta propuesta de que nadie se sienta solo aunque viva solo". Añade que "también se puede sentir soledad viviendo con mucha gente".
La consejera de Bienestar Social, Bárbara García Torijano, apuntó que en Castilla-La Mancha hay 400.000 personas con más de 65 años, de las cuales 100.000 viven solas, aunque matizó que no todas esas personas están en una situación de soledad no deseada. Explica que esta estrategia consiste en "trasladar nuestros recursos al papel para hacer esta hoja de ruta que tenemos que seguir mejorando".