Castilla-La Mancha es este 2024 Región Europea del Deporte. En La Tribuna queremos contribuir también con nuestro granito de arena a la conmemoración de este año y por eso hemos contactado con una treintena de castellanomanchegos vinculados con el deporte para que nos cuenten desde dentro cómo es su mundo y qué lecciones podemos sacar de su experiencia. A lo largo de este mes de junio podrán leer cada día los testimonios de deportistas de élite, de los que están empezando y de los que acaban de dejarlo, de quienes han sido olímpicos o paralímpicos y de quienes lo serán en solo unas semanas en París, de quienes son entrenadores, directores deportivos, guías o incluso seleccionadores.
«Para ser guía tienes que dejarlo todo de lado para centrarte en otra persona»
En el mundo del deporte se puede ser un deportista amateur, profesional, se puede ser entrenador, preparador físico... pero Sergio Díaz tiene una función muy especial: es guía. Hasta hace poco desarrollaba su carrera deportiva en el atletismo, en las disciplinas de 400 metros (una vuelta entera a la pista) y 400 metros vallas, compitiendo en campeonatos de España. Desde hace un año este joven de Daimiel ha aparcado su carrera deportiva individual y es guía de la atleta Melani Bergés Gámez, que tiene una discapacidad visual.
«Tienes que dejarlo todo de lado para centrarse en esa persona», explica Sergio, «cuesta adaptarte porque era algo nuevo para mí y no es tan fácil como la gente se piensa». Señala que no se trata solo de correr junto a ella y explica que, por ejemplo, tienen que «compenetrarse» muy bien con la «misma magnitud de zancada» y trabajar la salida de tacos, algo que considera que es de las más partes más complicadas.
Pero también tiene un componente psicológico importante, que no solo se circunscribe al momento exacto de la carrera. «Si no confía en el guía, no va a sentirse totalmente cómoda», explica. También reconoce que tiene mucha responsabilidad a la hora de no perjudicar a Melani. «Yo tengo mucha presión en ese aspecto, de no cometer ningún fallo», expone, «ella lo puede cometer por los nervios, pero tienes que intentar que tú no». Recuerda que en el Mundial del pasado año hubo varias descalificaciones por parte de los guías.
Con Melani Bergés, Sergio Díaz forma dupla para competir en las distancias de velocidad de 200 metros y 100 metros. Cuenta que se acerca a Yuncos, en Toledo, a entrenar. La parte de fuerza la hacen cada uno más por su lado, pero todas las semanas entrenan de manera conjunta de tres a cuatro días por semana, con unas sesiones que van de una a dos horas, cuando no llegan a las tres. Ahora el objetivo lo tienen en la clasificación de los Juegos Paralímpicos de París. Tienen que hacer una mínima de 10,3 segundos en 100 metros antes del 16 de junio, una marca que la tienen muy cerca.
Sergio Diaz confiesa que está aprendiendo mucho con esta experiencia como guía. «Me ha supuesto un beneficio bastante importante poder ayudar a otra persona», abunda, «me ha venido muy bien para crecer como persona».