La pasión renovada en la cerámica de la Basílica del Prado

C. S. Jara
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La cerámica del pórtico del templo, recién restaurada, ofrece la representación de la pasión y muerte de Jesucristo

Paneles de cerámica de la pasión de Cristo en el atrio de la Basílica del Prado. - Foto: CSJ

Los Jardines del Prado y la Basílica son el escenario para el arranque este domingo de la Semana Santa de Talavera. Un inicio que marca la primera procesión del domingo de Ramos, 'La Borriquita' que sale de la Basílica del Prado para después recorrer el paseo central de los jardines. Este recorrido servirá además este año para devolver a los talaveranos uno de sus espacios más queridos, el parque histórico, que lleva cerrado al público año y medio para su remodelación.

No será el único estreno. Hace todavía muy poco, en diciembre pasado, se descubría la cerámica del pórtico de la Basílica del Prado, tras su rehabilitación y después de casi seis años protegida y oculta para la vista de los visitantes. 

El trabajo para rehabilitarla ha devuelto el esplendor a este singular conjunto del patrimonio cerámico de la ciudad, sin duda uno de los tesoros culturales de Talavera. Se trata de 1.700 azulejos, dispuestos a ambos lados de la puerta principal de acceso al templo,  que se realizaron entre 1569 y 1571 y forman parte del conjunto de paneles de la desaparecida ermita del antiguo hospital de los Hermanos Hospitalarios de San Antonio. 

Unos azulejos que han recuperado su colorido y su integridad y que lucen hoy más brillantes que nunca. En ellos se representan diferentes escenas de la vida de Cristo, como la adoración de los Reyes Magos, su bautismo, las tentaciones en el desierto o la Pasión. De esta se destacan la representación de Cristo camino del Calvario, la crucifixión, el descendimiento, la Piedad, el sepulcro y la resurrección. Pero la más llamativa de todas es seguramente la que queda en la parte izquierda del atrio, con la representación de Jesús ya resucitado entre una procesión de vírgenes y otra de los Tercios de Flandes. Ambos motivos, el de las vírgenes y el de los tercios, se han convertido además en motivos muy utilizados por la cerámica contemporánea. 

Además, en la parte superior del atrio se puede apreciar la genealogía de Cristo hasta su natividad. 

Unas escenas en cerámica, por tanto, muy adecuadas para la Cuaresma y el recuerdo de la Pasión que se vivirá en estos días de Semana Santa.