La Cátedra del Tajo recomienda soluciones basadas en la naturaleza para evitar inundaciones en la cuenca del Tajo con posibles futuras danas. En el arroyo Ramabujas, objeto de estudio tras la última, se traducen en mantener las cubiertas vegetales en los leñosos, porque «la gota de agua, cuando cae directamente sobre el suelo, si no pasa por una cubierta vegetal, erosiona en gran medida». Todo pasa por mejorar las cubiertas vegetales aguas arriba, y eso evitará lodos como en Valencia. También recomienda la Cátedra instalar en las cárcavas determinadas barreras para el control de la erosión. En este caso también se proponen dos zonas de laminación controlada de avenidas en Nambroca y otra antes de que se cruce la To-23. Así lo ha explicado la directora de la Cátedra UCLM-Soliss, Beatriz Larraz en un desayuno informativo, en el que ha pedido la concertación de actores como la propia CHT, municipios y agricultores, que ya se está llevando a cabo.
Tras la Dana, se percataron que los 18 municipios afectados tenían características comunes, como canalizaciones muy duras de hormigón y población en el cauce de los ríos, ocupando llanuras que necesita el río para expandirse. Suntory fue la que dio la financiación para estudiar la situación y soluciones del arroyo Ramabujas, entre las localidades de Toledo y Nambroca, para una vez establecido el diagnóstico de los problemas e identificadas las acciones prioritarias, proceder a su puesta en marcha.