La Semana Santa de Talavera se consolida como uno de los eventos más importantes, con una repercusión religiosa, social y económica que no para de crecer. Año tras año, se incrementan los actos procesionales, las actividades culturales y la cifra de visitantes, siendo un importante apoyo como recurso turístico para la ciudad y la comarca.

La Junta de Cofradías y Hermandades de Talavera agrupa a 12 cofradías y algo más de 6.000 hermanos que dan forma, con mimo y esmero, a una celebración que ya es referente en el conjunto de Castilla-La Mancha. Así lo acredita su reconocimiento como Fiesta de Interés Turístico Regional, base sobre la que pronto se empezará a trabajar para dar otro salto más, el que acredite el Interés Turístico Nacional.

La de Talavera es una conmemoración en permanente expansión, gracias al trabajo de la Junta de Cofradías y al esfuerzo individual de los cofrades, que contribuyen a hacer más grandes los actos litúrgicos que se inician este viernes con el traslado de la Virgen de la Paz de la Cofradía de Regantes, desde el convento de las Madres Bernardas, hasta La Colegial.

Una Semana Santa de 12 cofradías y más de 6.000 hermanos - Foto: Manu ReinoA partir de aquí, la Semana Santa comenzará a andar, aunque lo hace desde mucho antes con el trabajo de las hermandades.

Al sentimiento y pasión de los cofrades talaveranos, guiados en Semana Santa por el fervor a sus imágenes, verdaderas obras de arte  del patrimonio imaginero de la ciudad, se suma la belleza de los escenarios en los que se desarrolla. Talavera ofrece la posibilidad de contemplar las procesiones desde sus magníficas murallas, el puente romano sobre el río Tajo o las siempre emocionantes salidas de La Colegial o la iglesia de Santiago. Sus cofrades, vestidos con túnicas y capirotes o cabeza cubierta, portan andas e imágenes de gran valor artístico y patrimonial -la más antigua que procesiona en Talavera es del siglo XV-, acompañados en su recorrido por música de agrupaciones y bandas nacidas con vocación cofrade.