Resulta extremadamente complejo realizar un cálculo exacto del número de pisos o viviendas turísticas operativas en la ciudad de Toledo. Y más aún sin una normativa municipal que se encargue de su regulación. Sin embargo, es llamativo que en apenas dos años, aproximadamente uno y ocho meses, los registros hayan crecido tanto en términos porcentuales teniendo en cuenta que las licencias del uso de estos inmuebles llevan paralizadas prácticamente el mismo periodo en el Casco Histórico, donde se concentran la inmensa mayoría de estas propiedades dedicadas a recibir turistas.
Para poder hacer un cálculo lo más cercano posible a la realidad, este análisis ha partido de la base de un artículo similar que este diario publicaba el 30 de enero de 2023. Por aquel entonces, se recogieron los registros del área de Urbanismo del Ayuntamiento de Toledo, de la Dirección General de Turismo de la Junta de Comunidades, del informe de Viviendas Turísticas por municipios del Instituto Nacional de Estadística (INE) y de Airbnb, una de las plataformas online más demandadas para la búsqueda de hospedaje.
Apenas 15 días después del muestreo realizado por La Tribuna las administraciones paralizaron la tramitación de nuevas licencias de estos inmuebles hasta la creación de una nueva normativa que requería de una modificación puntual del Plan de Ordenación Municipal. Con la llegada del ejecutivo de Carlos Velázquez a la Alcaldía esta opción se disipó y el bipartito ya trabaja en una nueva ordenanza que regule la situación de los pisos turísticos en la ciudad. Con casi dos años de parálisis lo normal sería que el número de inmuebles no haya crecido, en cuanto al Casco Histórico se refiere -en el resto de la ciudad podría hacerlo sin inconvenientes-. Es el momento de ver la comparativa.
Aumenta un 20% el número de pisos turísticos en apenas 2 años - Foto: Yolanda LanchaActualización de datos. Pese a que es el Ayuntamiento de Toledo el que da o no el visto bueno al uso de estos apartamentos o viviendas, hasta la creación de la nueva ordenanza es la Junta de Comunidades quien tiene las competencias. Es por ello que el dato aportado por esta administración podría tratarse del más exhaustivo de todos los acotados.
Al respecto, en enero de 2023 la Dirección General de Turismo tenía en su recuento particular un número aproximado de 484 pisos turísticos, de los que en su día puntualizó que el 84,4% estaban ubicados en el Casco Histórico. Hoy, casi dos años después, el mismo área de carácter regional contabiliza 556 Viviendas de Uso Turístico y 28 Apartamentos Turísticos. La principal diferencia entre ambos reside en que las primeras son una única casa a alquilar mientras que los segundos son un bloque de viviendas que se dedican exclusivamente al turismo en su conjunto. Aunque las unidades residenciales de los apartamentos varía en relación con el de las viviendas se ha optado por sumarlos para facilitar la comparativa de las plazas. De esta forma, el cerco se estrecharía a 584 alojamientos turísticos contabilizados por la Dirección General de Turismo, 100 más que en el anterior recuento, y que en términos porcentuales supone un 20,66 por ciento más en el conjunto de la ciudad.
Este dato no se asemeja ni de lejos al ofrecido por el área de Urbanismo del Ayuntamiento de Toledo. Quizás por la cercanía de la nueva regulación, el gobierno local ha aumentado de manera excesiva los inmuebles contabilizados. Esto es así porque en enero del año 2023 el Consistorio facilitó tan sólo 208 licencias favorables y 82 en trámite, mientras que ahora ha detallado que cuentan con 418 en el Casco Histórico y 78 fuera de él, es decir, 496 en total, traduciéndose en un aumento del 138,4 por ciento. Son más del doble con las tramitaciones paralizadas en el barrio antiguo de la ciudad.
Aumenta un 20% el número de pisos turísticos en apenas 2 años - Foto: Yolanda LanchaSiguiendo con el recuento, el INE ofrece su estimación por municipios dos veces al año, en febrero y en agosto. En esta ocasión aún no ha dado a conocer los registros del octavo mes del año, pero ya en febrero contabiliza 672 alojamientos por los 492 del mismo mes en el año 2022. Esto significa otro incremento del 36,58 por ciento.
La última comparativa y, quizás la más compleja de las expuestas, es la que ofrece el portal de alquiler vacacional Airbnb. Su mapa interactivo ofrece actualmente 802 oportunidades de alojamiento en el conjunto de la ciudad, mientras que si se estrecha el cerco a únicamente el barrio histórico el número se reduce a 586 inmuebles. Estas cifras reflejan un aumento del 24,41 por ciento en el casco y de un 45,55 en el conjunto municipal.
Con uno u otro dato, la estadística crece. Algo fácil de intuir especialmente con la proliferación de las cajas que guardan las llaves de estos alojamientos instaladas por cada vez más rincones de la ciudad. Toledo espera mientras tanto su regulación.