Siempre se ha dicho que los sueños se pueden hacer realidad. Y es lo que desea con todas sus ganas la asociación Dama, encargada de dar lectura al manifiesto de este primer martes de marzo en el parque de la Vega, durante la tradicional concentración que desde hace meses se muestra dividida entre dos pancartas y otros muchos asistentes que no forman parte de ninguna en cada una de las convocatorias que se celebran.

Las cifras siguen dominando el manifiesto. 1475 víctimas de violencia de género asesinadas en nuestro país desde que existen los registros, pero el número se queda corto porque no incluye «a las madres, amigas o hermanas asesinadas al mismo tiempo que están fuera de las estadísticas porque no tenían vínculo sentimental con el asesino». Y lo mismo ocurre con  «las prostitutas y las víctimas de abusos sexuales».

En este caso, esta asociación, que lleva 35 años trabajando en Toledo por la igualdad efectiva desde el barrio del Polígono, tiene claro «que la violencia es estructural y mata, con lo que se debe trabajar desde el Estado» y exige «cooperación y coordinación» de las administraciones, de los distintos colectivos y de la sociedad civil.

A pocos días de la celebración del 8 de marzo, Dama insistió en la necesidad de abrazar el lema de Naciones Unidas (ONU), bajo el lema 'financiar los derechos de las mujeres: acelerar la igualdad', con el que se pone de manifiesto que la igualdad de género sigue siendo un reto primordial en materia de derechos humanos. Una lucha en la que hombres y mujeres deben participar para lograr esa igualdad real y efectiva que se pide todos los años, una igualdad «clave para la construcción de un futuro sostenible».

La asociación Dama es consciente de que todavía hay que recorrer un camino largo a pesar de iniciativas, avances y logros, porque todavía pervive «ese machismo enraizado en la sociedad» al que hay que retirar el foco. 

Por este motivo, soñar es otra de esas opciones. «Soñar con la noticia» de que un día te levantas y te enteras de que se ha acabado  la violencia. 

Público. La cercanía del 8 de marzo se dejó notar esta mañana en la concentración, que contó con muchos  más participantes que de costumbre, tanto junto a una pancarta, la que ostenta el Ayuntamiento a través del Consejo Local de la Mujer, como en la del Partido Socialista, que desde hace meses se sitúa enfrente para dejar claro que no apoyará a un Gobierno municipal en el que se encuentra Vox. Y en medio de ambas se encontraba Izquierda Unida, dado que no está dispuesta a encabezar ninguna de las dos pancartas porque ninguna de las dos líneas políticas que se exhiben convencen a esta formación.

En esta ocasión, la convocatoria, prevista a las diez de la mañana, se retrasó algo más de diez minutos. Tras la lectura del manifiesto, se guardó un minuto de silencio y se colocaron tres velas en el monumento a la mujer en homenaje a las tres víctimas de violencia de género asesinadas el pasado mes de febrero.