El riesgo de apagón sobrevuela las agendas políticas desde hace tiempo y se ha colado en los medios de comunicación como posible escenario debido a la saturación eléctrica y la posible vulnerabilidad a cuenta de un mundo hiperconectado, pero estos mensajes más propios de ficción que se lanzan desde hace tiempo se convirtieron ayer en realidad a las 12,32 horas. Toledo afrontaba con normalidad su mañana de lunes cuando se produjo un apagón generalizado que ha durado más de seis horas y ha obligado a las administraciones a coordinarse con rapidez y a tomar medidas de seguridad para que el día transcurriera con cierta normalidad a pesar de no contar con electricidad.

En los primeros minutos del apagón en la ciudad se tomó como un corte de luz más, como suele suceder cuando se produce alguna avería. Sin embargo, poco después comenzaron a circular en los móviles que la falta de suministro eléctrico se extendía también a Castilla-León. A los pocos instantes la noticia apuntó que afectaba a España y de ahí que el apagón también se había dejado notar en Portugal, en algunas zonas de Francia y en media Europa.

La ciudad tenía que garantizar la seguridad y en esa tarea se volcaron desde el primer momento las administraciones para que Toledo pudiera afrontar esta anomalía con relativa normalidad dentro de que las circunstancias no eran normales y el apagón produjo algunas incidencias. Los bomberos fueron de los primeros en intervenir para rescatar a las personas que se habían quedado atrapadas en ascensores de edificios, oficinas, centros de trabajo y comunidades residenciales. Dos horas más tarde, el alcalde de Toledo, Carlos Velázquez, informó en las dependencias de la Policía Local asegurando que ya se había excarcelado a todas las personas que en el momento del apagón subían o bajaban del ascensor.

Toledo vive siete horas ininterrumpidas de apagón

El cuartel de la Policía Loca se convirtió en la sede "del comité de crisis improvisado", como informó el alcalde, debido a la caída de las telecomunicaciones que impedían llamadas telefónicas. Aun así, el Ayuntamiento se ha puesto en contacto con el resto de administraciones, incluido el servicio de emergencias 112, para trabajar en línea con otros cuerpos de seguridad, como Policía Nacional y Guardia Civil.

Dentro de sus competencias, el Ayuntamiento puso especial atención a la movilidad. El tráfico necesitó un despliegue especial de policías locales en la calle para aliviar retenciones y evitar accidentes por la falta de funcionamiento de los semáforos. En este caso, los agentes se desplazaron a las zonas de mayor afluencia de vehículos y a los cruces semafóricos con mayor riesgo, en los que colocaron conos para limitar algunas direcciones a fin de facilitar la circulación y garantizar que no se produjeran accidentes. Esta labor se ha llevado a cabo con éxito gracias a la reorganización de los turnos de los policías para incrementar la presencia, sobre todo, a la hora de salida de los centros educativos, uno de los momentos de mayor tráfico en la ciudad.

"La seguridad está garantizada", subrayó el alcalde pasadas las dos y media de la tarde, tanto en lo que compete a la Policía Local de la ciudad como a la Policía Nacional, esta última encargada de velar especialmente por la seguridad ciudadana.

Toledo vive siete horas ininterrumpidas de apagón

Sin embargo, "ante la incertidumbre" de la duración del apagón, que finalmente duró siete horas, Velázquez lanzó varios mensajes a la ciudadanía con recomendaciones para sobrellevar esta anómala situación de la mejor manera posible. El alcalde recomendó evitar en lo posible los desplazamientos, ya que las gasolineras tampoco podía surtir combustible por falta de suministro eléctrico. Y en caso de desplazamientos, Velázquez pidió prudencia por la falta de señalización luminosa en toda la ciudad.

En relación al transporte público, la Concejalía de Movilidad también estuvo en contacto en todo momento con Unauto, la concesionaria del servicio, para garantizar el flujo de autobuses urbanos por la ciudad. En este caso, los autobuses funcionaron con normalidad, únicamente el alcalde avanzó que podrían producirse reajustes en caso de que el apagón durara demasiadas horas, pero se tomara o no la decisión quedaban garantizados todos los transportes a los centros sanitarios de la ciudad. En este caso, el hecho de que la mayoría de la flota de autobuses utilice gas también ayudó a prestar el servicio con normalidad, dado que solamente unos pocos vehículos son eléctricos. En este contexto, Velázquez también añadió que Toledo contaba con combustible suficiente en la sede de Unauto en el Polígono.

Los centros educativos también se vieron afectados por el corte, pero el problema se trasladó principalmente a los comedores, dado que algún colegio decidió cambiar la rutina y avisar con antelación a las familias para recoger al alumnado una vez finalizadas las clases. Sin embargo, la mayoría también intentó mantener la máxima normalidad posible con su servicio de comedor incluido.

Toledo vive siete horas ininterrumpidas de apagón

El agua. La falta de suministro eléctrico también derivó en problemas en otros servicios. El abastecimiento de agua se vio con dificultades en las zonas más altas de la ciudad. El alcalde avanzó que las estaciones de bombeo podían sufrir bajas de presión y cortes en algunos momentos, una situación que afectó especialmente al parque comercial 'La Abadía' y a otras zonas altas de Toledo como La Legua, la Pozuela o el Beato.

Desde el Ayuntamiento se puso desde el primer momento a disposición de la ciudadanía un importante refuerzo de bomberos y de policías locales para salvar esta situación anómala de la mejor manera posible dentro de las molestias y de las dificultades que sufrieron ayer los toledanos por el corte de luz durante horas y la caída de buena parte de las comunicaciones.

Más recomendaciones. Desde la administración municipal se tuvo que suspender todas las actividades municipales ante la falta de suministro eléctrico. Además, el Ayuntamiento emitió un comunicado alrededor de las tres de la tarde recomendando a la ciudadanía que se fuera informando de la situación únicamente por fuentes oficiales y utilizara el 112 únicamente en caso de emergencia, evitando las consultas.

Toledo vive siete horas ininterrumpidas de apagón

Al mismo tiempo, Velázquez puso a disposición de la ciudadanía el cuartel de la Policía Local e invitó a quienes lo necesitaran a desplazarse hasta allí en caso de que los móviles no funcionen y necesitaran comunicarse con alguien.

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