Plantar en riberas o bordes de caminos especies autóctonas adaptadas al clima y crear charcas o nidos artificiales para las aves, entre otras acciones, ha permitido recuperar la biodiversidad y la rentabilidad de cultivos de secano en más de 500 hectáreas de fincas de Castilla y León, Castilla-La Mancha, Extremadura, Aragón y Andalucía.
Se trata del proyecto denominado 'Secanos Vivos', de la Sociedad Española de Ornitología (SEO/BirdLife), que se está desarrollando en treinta fincas, veinte de cereal y diez de viñedos, y cuenta con un presupuesto de dos millones y medio de euros.
La revegetación, como plantaciones en riberas de arroyos, bordes de caminos o zonas improductivas con especies autóctonas adaptadas al clima, la creación de infraestructuras físicas como bebederos, charcas o nidos artificiales para las aves y el manejo del suelo para reducir los fitosanitarios son los tres campos de actuación en los que se trabaja.
No solo las materias primas forman parte del proyecto, las elaboradoras y bodegas son otros agentes asociados, que se encargan de transformar los productos de estas fincas en alimentos para el consumo.
En cada una de las fincas que forman parte del proyecto se han definido una o más parcelas demostrativas donde se están produciendo estas actuaciones.
Juan Francisco López, técnico de Secanos Vivos en Castilla–La Mancha explica otros beneficios: «Con estas actuaciones de aumento de la biodiversidad y captura de carbono, intentamos recuperar los servicios ecosistémicos que se han perdido, sobre todo por el cambio de parcelas de secano a regadío. Estos servicios serían los de refugio y alimento, y los culturales, dándoles un enfoque holístico al proyecto».
Dionisio de Nova, viticultor de La Bodega de las Estrellas, en Valdepeñas explica la importancia de acogerse a estas medidas para adaptar sus vides al cambio climático: «Estamos viviendo unas condiciones extremas de lluvias y sequías, y tratar de potenciar y valorizar los secanos es ideal para este territorio. Yo creo que este proyecto puede servir como ejemplo para seguir por otros agricultores, y eso me parece fantástico».