La agricultura europea, concepto de lato sensu donde los haya, como no deja de ser una actividad humana imprescindible suele ser la causa de encendidos debates públicos, discusiones partidistas y, por ello, objeto de interés para las políticas públicas. Poco sorprendente es, en consecuencia, que esto haya pasado también en 2023, año en el que, además de comenzar a aplicarse en los territorios la política agroalimentaria diseñada por la UE hasta 2027, se comenzaron a notar los efectos de la cercanía de procesos electorales. Elecciones no solo en el Parlamento Europeo, en varios Estados miembros y en algunas regiones, sino también en países con los que se mantiene una relación estratégica como EEUU, Reino Unido, Rusia, Indonesia, India, en países autocráticos como Irán y Bielorrusia e incluso hasta correspondería que se celebraran en Ucrania.
Esto, probablemente, ha hecho más complicado llegar a acuerdos, en las distintas etapas del proceso político, para lograr el desarrollo legislativo de las propuestas de la Comisión sobre el Pacto Verde y la Estrategia de la granja a la mesa, que en su día se plantearon como una necesidad ineludible ante una realidad inevitable.
En estas circunstancias, comprendes que, mientras que en las regiones se esté preocupado y ocupado en poner en funcionamiento el new delivery model de la PAC que entró en vigor en enero de 2023 -diseñando medidas, tratando de facilitar, simplificar y flexibilizar los exigentes requisitos para los agricultores y ganaderos y proponiendo modificaciones para conseguir con menos recursos los objetivos de los reglamentos comunitarios hasta 2029-, se haya comenzado ya a discutir, sin esperar los resultados de la evaluación prevista, sobre cómo debería abordarse la política agraria europea para el período de 2028 a 2034. Puede que el principal detonante haya sido que el Consejo anunciara, a finales de diciembre, su decisión de iniciar las negociaciones de adhesión con Ucrania, poniendo en alerta a la agricultura europea, al temer la repercusión, no solo en el presupuesto agrícola, de la incorporación de Ucrania a la PAC, siendo, como es, una potencia agrícola mundial. Quizás también por la experiencia reciente, al liberarse el comercio en 2022, del fuerte descenso de los precios locales, fundamentalmente, en Hungría, Bulgaria, Polonia, Eslovaquia y Rumanía, que han impuesto unilateralmente restricciones, prohibiendo las importaciones.
El escenario sirve para explicarse mejor el enfoque multinivel para analizar la agricultura, ya que la agricultura, al igual que otras realidades complejas que devienen jurídicas, precisan de sistemas de articulación e interpretación de la realidad jurídica. Agricultura multinivel para designar un proceso político que se enmarca en un sistema de varios niveles de gobierno, con un complejo e integrado conjunto de normas procedentes de distintos ámbitos - internacional, supranacional, nacional, regional y local- que tienen sus propios intereses, pero que pertenecen a un solo ordenamiento.
Como los trenes largos que cuando la locomotora, que va en cabeza, tiene que emplearse para subir una nueva montaña, los últimos vagones van cómodamente ladera abajo o viceversa...