A Julieta le brillan sus ojos redondos y traviesos cuando se habla de cine o de teatro. Su mirada es más serena y está algo más gastada, pero a sus 91 años no pierde el brillo ni las ganas de seguir delante de las cámaras, aunque sea de manera esporádica. La actriz barcelonesa se empeña en decirle a todo el mundo que está retirada, más bien le echa la culpa a la edad, pero tampoco sabe decir que no cuando la llaman con un buen proyecto.
«El año pasado hice algo en Barcelona, pero ya me daba por retirada porque tengo una edad, estoy cansada y tengo el físico un poco averiado», cuenta Julieta con voz de abuela sabia y pícara. No pudo negarse a 'los Javis' (Javier Calvo y Javier Ambrossi), embarcados ya en el guión de su segundo largometraje, un proyecto que guardan con celo y sin ofrecer detalles. El teléfono volvió a sonar y la convencieron para un pequeño papel. «¡Cómo no voy a trabajar con estos chicos tan estupendos!», explica y remarca al mismo tiempo que son muy conocidos.
Julieta Serrano entrará a formar parte de la 'troupe' de 'los Javis' en este segundo largometraje que rodará el próximo año la pareja de directores, un segundo proyecto cinematográfico tras el éxito de 'La llamada' hace siete años. «Es muy apetecible trabajar con ellos», dice la actriz, que confiesa que ya está estudiando el guión, entre sus quehaceres diarios que incluyen paseos, lectura, salidas con los amigos y la familia al cine y al teatro, y una vida relativamente tranquila.
De Julieta Serrano nadie se olvida en la industria aunque tenga muchos años. Ella es consciente de que no hay oportunidades para interpretar a su edad, pero se lo toma con humor y lo acepta como viene. «Es normal que cada vez haya menos papeles y posibilidades. Además, el cuerpo también pide un poco de calma, tranquilidad y reposo. No tanto, trabajar, trabajar, trabajar...»
En esta etapa se encuentra ahora, intentando sobrellevar la cojera achacosa que sufre. Se resiste a no ponerse delante de la cámara y se ve con fuerza para seguir interpretando papeles pequeños de vez en cuando. Ya lo lleva haciendo tiempo. Así lo hizo también con uno de sus amigos del alma. Pedro Almodóvar también la llamó hace poco más de cinco años para que encarnara a la madre de Antonio Banderas en 'Dolor y gloria'. Una propuesta que aceptó ilusionada por volver a ponerse a las órdenes de Almodóvar por octava vez.
Precisamente, con este proyecto Julieta ganó un Goya a la mejor interpretación femenina de reparto en 2020. El primero y el único a pesar de su dilatada carrera. La actriz estuvo encantada de tener un hijo en la ficción como Antonio Banderas por tercera vez.
— «Y si volviera Pedro Almodóvar a pedirte que hagas un papel, ¿volverías a trabajar de nuevo?»
— «Claro, ¡cómo no iba a volver! Somos amigos desde hace mucho tiempo».
La admiración que se profesan ambos desde hace muchos años sigue muy viva. Quizá reforzada por el hecho de que Julieta Serrano también amadrinara a Almodóvar en 'Dolor y gloria' y homenajeara a su madre en esta película con tintes autobiográficos del cineasta manchego. Él mismo ha contado que se quedó fascinado con Julieta Serrano de joven cuando llegó a Madrid y la vio actuar en el teatro.
El galardón. Julieta tampoco ha tardado en decir sí al premio que le acaba de entregar el Festival de Cine y la Palabra (CiBRA). «Me hacía mucha ilusión venir a Toledo a recogerlo, aunque por la edad todo lo tengo que hacer despacito». En esta edición, el galardón 'Alice Guy de cine' recae en Julieta Serrano, y en la actriz Paz Vega, un reconocimieto ex aequo muy emotivo para ambas.
«CiBRA es un festival muy joven y yo no lo conocía, pero me he informado y enterado de a quiénes se han dado premios otros años, y me dio mucha satisfacción saber que es un festival que promociona la cultura», comenta la actriz, muy contenta de compartir el 'Alice Guy' con Paz Vega. «Cuando te dan un premio, por ejemplo, y hay otras nominadas está claro que nos lo merecemos todas, así que compartirlo es más satisfactorio aún».
A Julieta no se le escapa nada a pesar de que no conocía el festival. Sabía días antes de la gala que había otra tercera artista que también ganaría un premio Alice Guy este año, Luz Casal. Sin embargo, el reconocimento a la cantante no es cinematográfico, es un galardón que premia el trabajo en cualquier ámbito de la vida. Y la cantante lleva muchos años de carrera, dieciséis discos de estudio y, a su manera, también está vinculada a la industria cinematográfica con sus dos canciones en 'Tacones lejanos', otra de las películas más exitosas de Almodóvar.
El retiro. Julieta Serrano se siente afortunada, aunque no le gusta presumir de papeles, ni de sus películas más o menos exitosas. Tampoco de los directores con los que ha trabajado a lo largo de 70 años de interpretación en teatro, cine y televisión. Eso sí, algún proyecto se le ha quedado en el tintero y algunos personajes tampoco abandonaron el papel.
«He tenido mucha suerte y he trabajado con directores y directoras muy buenos, no me puedo quejar. Pero me hubiera gustado hacer más personajes de Chéjov porque he hecho muy poquitos y hubiera disfrutado mucho transitando por su mundo».
A Julieta el teatro le daba vida, pero en Barcelona no había muchas oportunidades en su juventud porque se llevaban los proyectos amateur y las propuestas profesionales escaseaban en aquellos momentos. Aun así, la actriz no se vino abajo y puso el objetivo en marcharse a Madrid para intentar entrar en alguna de esas compañías que tanto admiraba.
«Tanto Miguel Narros como José Luis Alonso fueron mis padrinos teatrales y me trajeron a Madrid», recuerda agradecida. Ahí comenzó su prolífica carrera. Durante seis años, vivió a caballo entre Madrid y Barcelona para trabajar como actriz de teatro. Y de ser una más en los repartos pasó a convertirse en protagonista gracias a 'Las criadas', obra que compartió con la actriz Nuria Espert en 1969, un espectáculo que dio mucho que hablar al borde de la década de los 70 y bautizó una nueva manera de hacer teatro.
En cine le ocurrió algo similar. De aparecer en cámara con un pequeño papel en 'Secuestro en la ciudad', de Luis María Delgado, pasó a estrenar una película cada año o dos años. En su palmarés figuran setenta largometrajes, muchos de ellos junto a reconocidos directores, como Carlos Saura ('Cría Cuervos'), Pedro Almodóvar ('Pepi, Luci y Bom y otras chicas del montón', 'Entre tinieblas', 'Matador', 'Mujeres al borde de un ataque de nervios', 'Átame', 'Dolor y Gloria' y 'Madres paralelas').
La lista es tan amplia que Julieta tiene experiencia y anécdotas para contar durante varias horas con Vicente Aranda, Chus Gutiérrez, Eloy de la Iglesia, Daniel Calparsoro, Amparo Climent y otros muchos nombres de la industria española.
Las generaciones más jóvenes también reconocen el trabajo de Julieta Serrano en televisión, con series como 'Ana y los siete'; 'Herederos'; 'Cuéntame cómo pasó',y 'Arde Madrid', entre otras producciones audiovisuales.
Julieta no tiene prisa por cortar la conversación con La Tribuna, pero dice con cierta modestia que ya lo ha contado todo y resume su buen estado de ánimo actual a pesar de los achaques de alguien que va camino de los 92 años. «Estoy muy agradecida. Es una palabra muy importante en mi vida. Y muy contenta también».