El Ejército de Corea del Sur ha denunciado este domingo el lanzamiento de unos 720 globos con estiércol y basura por parte de Corea del Norte, horas después de que otros diez globos cruzaran la frontera en lo que Seúl considera una violación del alto el fuego.
Según han informado las Fuerzas Armadas surcoreanas, los globos han cruzado la línea de armisticio que separa las dos Coreas, cayendo en diferentes partes del país entre las 20.00 horas del sábado y las 10.00 horas del domingo (entre las 13.00 horas del sábado y las 03.00 horas del domingo en la España peninsular).
"Entre 20 y 50 globos se mueven por hora en el aire y descienden en Seúl, la provincia de Gyeonggi, la provincia de Chungcheong del Norte y la provincia de Gyeongsang del Norte", ha declarado un funcionario a la agencia de noticias surcoreana Yonhap.
Los globos transportaban diversos trozos de basura, como colillas de cigarrillos, papel y bolsas de plástico, al igual que los globos anteriores, según ha informado el Estado Mayor Conjunto del Ejército surcoreano.
Una serie de equipos se han desplazado a las localidades donde han caído los globos con el objetivo de recuperar los restos ante el temor de que "transporten sustancias químicas tóxicas". Asimismo, un servicio de emergencias estará disponible las 24 horas del día en la capital surcoreana para responder a este tipo de objetivos, tal como recoge la citada agencia.
El Ejecutivo surcoreano estudia tomar contramedidas, después de que Corea del Norte haya interferido durante cinco días seguidos las señales GPS en aguas cercanas a las islas fronterizas del noroeste de Corea del Sur. Además, está previsto que el Consejo de Seguridad Nacional se reúna a última hora de este domingo para "debatir la provocación del globo del Norte".
Seúl había denunciado la llegada de unos 260 globos aerostáticos similares entre el martes y el miércoles en lo que Pyongyang defendió como una respuesta al lanzamiento de panfletos procedentes de Corea del Sur. El Ministerio de Unificación de Seúl advirtió el viernes de que tomará medidas "insoportablemente" dolorosas contra Corea del Norte si sigue protagonizando actos de provocación "irracionales".
Corea del Sur podría considerar la posibilidad de llevar a cabo una guerra psicológica contra Corea del Norte, incluida la reanudación por parte de las autoridades militares de las emisiones por megafonía a lo largo de la frontera o el envío de panfletos críticos con el régimen del Norte.