El robo de varios repetidores de telefonía móvil en Talavera La Nueva ha ocasionado problemas en la cobertura en todo el municipio, afectando a vecinos y al mismo Ayuntamiento, que no pueden realizar sus gestiones diarias con la misma agilidad. La sustracción, que tuvo lugar el pasado 24 de febrero, está generando problemas de conexión en toda la Entidad Local Menor, con unos 1.500 vecinos, algunos de ellos trabajando desde casa y sufriendo las consecuencias de este suceso.

El alcalde de Talavera La Nueva, Jesús Mencía, confirma a este diario que el robo de estos repetidores o responsables de transmisión y recepción de señales, en los equipos RRU 1800, 700 y 900, en una antena de la localidad, ha generado que no puedan realizar llamadas sin numerosos cortes, mientras que el funcionamiento de los servicios de internet deja también bastante que desear.

Así, al mal servicio en las llamadas, se unen el deficiente envío de fotografías o mensajes, como el que el pasado lunes llegó a los móviles de las localidades más cercanas al río Alberche, la ES-Alert enviada por Protección Civil por riesgo de inundación, y que en Talavera La Nueva no llegó a todos, o lo hizo después, cuando localizaban un lugar con más cobertura. Incluso para el «servicio de teleasistencia para las personas mayores quizá también se necesita cobertura», añade.

Así, a los daños económicos de este robo, se unen los producidos por la falta de servicio de telefonía, mensajería e Internet, tanto para las operadoras como para los usuarios.

Al parecer, y según ha podido conocer el alcalde, los repetidores robados son propiedad de Vodafone, aunque la falta de servicio afecta a todas las comercializadores de servicios de telefonía móvil, y así lo están comprobando. Además de Vodafone, el resto de compañías también deber arreglar su correspondiente equipo.

En este sentido, y según pudo comprobar ayer este diario en su llamada con el alcalde, es complicado finalizar una conversación telefónica sin numerosos cortes de sonido, acabando Mencía por establecer la comunicación mediante un teléfono fijo aunque, como bien recordó, «ya no todo el mundo tiene teléfono fijo en sus casas».

El alcalde explica que sus vecinos ya han tenido mucha paciencia, conscientes de que se trata de una «avería importante» y que requiere unos días para solucionarlo, «pero ya han pasado casi tres semanas y esto ya es mucho, tendría que estar ya resuelto».

Por ello, les anima a poner reclamaciones en sus respectivas compañías telefónicas, buscando una mayor agilización de la avería y, en consecuencia, un descuento en la factura, porque el servicio ofrecido no ha sido el adecuado.

Durante este tiempo, los habitantes de Talavera La Nueva no dejan de buscar más cobertura por sus casas o en diferentes puntos del municipio, «como pasaba hace años». «La gente está cabreada», finaliza.