Desde hace unas semanas, el Hospital 'Santa Bárbara' de Puertollano, adscrito al Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (SESCAM), cuenta con varias consultas monográficas de Ginecología y Obstetricia con las que se ha mejorado notablemente la atención a las mujeres que acuden al centro hospitalario.
Según ha explicado la nueva jefa de servicio, Lola López Cánovas, hasta ahora en el 'Santa Bárbara' había una única consulta general de Ginecología para todas las mujeres, sin discriminar por patologías ni entre las que acudían a primeras visitas o a revisiones, y "lo que hemos hecho es abrir consultas monográficas por patologías o necesidades para intentar dar a cada paciente la atención especializada que precisa".
En total, se han abierto cinco nuevas consultas especializadas. La de Ginecología general se mantiene para atender a las mujeres que proceden de Atención Primaria como "unidad de resolución o derivación: las pacientes sin patología son dadas de alta y aquellas que presentan algún problema pasan a las consultas monográficas".
Las dos primeras son las de Patología Cervical, para el tratamiento y seguimiento de las lesiones provocadas por el virus del papiloma humano, lesiones vulvares como el liquen escleroatrófico, etcétera, y la de Patología Ginecológica, donde se aborda el diagnóstico, seguimiento y tratamiento de la patología orgánica (miomas, endometriosis, entre otras).
Las otras tres consultas son las de Anticoncepción, para atender las demandas anticonceptivas de las pacientes; de Esterilidad y Patología Funcional, donde se aborda el estudio de la pareja estéril, las pérdidas reproductivas recurrentes o el síndrome de ovario poliquistico, y, finalmente, una consulta de Postparto para el seguimiento de las pacientes que acaban de tener un bebé.
Además de estas cinco consultas presenciales, el servicio de Ginecología del hospital 'Santa Bárbara' ha puesto en marcha otra telefónica para comunicar resultados de pruebas diagnósticas, mantener el contacto con las pacientes tras una intervención o valorar la tolerancia a determinados tratamientos médicos.
En Obstetricia ocurría algo similar. Existía una única consulta, en la que no se discriminaba la edad gestacional de la paciente. En la actualidad, en cambio, se dispone de tres consultas diferenciadas, una en la que se citan las gestaciones de 12 y 20 semanas, otra para gestantes en la semana 34 y una consulta de Bienestar Fetal a partir de la semana 38.
En la semana 12 es cuando se realiza el cribado de cromosomopatias (como el Síndrome de Down) y el de preclampsia. En la semana 20 se realiza la ecografia morfológica del feto y en la 34 se evalúa el crecimiento del feto y desde allí se deriva a la gestante a la consulta de Bienestar Fetal.
Esta nueva consulta añade una ecografía a la asistencia de monitorización que se realizaba en el paritorio. En cambio, "ahora las futuras madres vienen en la semana 38 a consulta, pasan por la monitorización fetal con la matrona y posteriormente el ginecólogo realiza la ecografia en ese mismo momento", ha aclarado la doctora López Cánovas.
Todas estas novedades llevan pocas semanas en funcionamiento, pero "los resultados son óptimos a la vista de la valoración de las pacientes", ha señalado.