Once años sin Plan de Ordenación Municipal de Toledo, echando mano de distintas modificaciones del aprobado en el 86 para no dejar paralizada la ciudad. Un contexto complejo que ha puesto a prueba todos estos años a los toledanos, confirmando de paso su paciencia y «su resistencia extraordinaria» a pesar de las trabas con las que ha lidiado Toledo.
«El POM será la herramienta más importante para hacer ciudad». Así lo dejó caer ayer el alcalde de Toledo, Carlos Velázquez, instantes después de escenificar la firma del contrato con 'Ezquiaga Arquitectura', el equipo redactor que asume la asistencia técnica de la redacción del Plan de Ordenación Municipal, que se articulará en cuatro fases de trabajo que tiene como reto tenerlo listo para su aprobación inicial en el Ayuntamiento en mayo de 2027, en plenacampaña electoral.
El retraso en la adjudicación de este contrato ha colocado al Ayuntamiento en una difícil situación y ha obligado a trabajar a contrarreloj para que la segunda licitación saliera adelante tras una primera desierta por escasez de presupuesto. Si bien, finalmente a la segunda convocatoria se presentó 'Ezquiaga Arquitectura', empresa especializada y experta en diagnósticos y planes urbanísticos, y ha resultado adjudicataria del contrato por 687.560 euros.
Toledo inicia el camino del POM para aprobarse en mayo de 2027 - Foto: David PérezTras la firma, Velázquez señaló que el POM, que también incluye la actualización del Plan Especial del Casco Histórico (PECHT), «será la herramienta más importante para hacer un proyecto de ciudad» y dejó caer que el actual equipo de Gobierno lo tenía en la agenda como obligación, «no como una opción» porque la ciudad necesita cohesionarse, coser sus barrios y planificar su futuro desarrollo teniendo en cuenta todos los condicionantes que la rodean por ser Ciudad Patrimonio de la Humanidad y por contar con el río Tajo, entre otros.
«Nunca nos hemos arrugado ni hemos mirado para otro lado», sostuvo el alcalde, convencido de la necesidad de dotar a Toledo de un buen instrumento urbanístico que permita a la ciudad avanzar, dar respuesta al crecimiento demográfico, mejorar la oferta de vivienda, que contribuirá a su vez a frenar el éxodo a municipios de cercanos, teniendo en cuenta «que en el primer anillo 50.000 habitantes», la mayoría con trabajo en la capital.
Por tanto, el objetivo principal es que Ezquiaga Arquitectura, que iniciará en estos días la primera fase de redacción del POM, con una duración de ocho meses, «haga un documento con transparencia, participación y muchísima generosidad». Un plan que toma como base el avance que se redactó el equipo de Gobierno de Tolón en la anterior legislatura.
Una postura que también comparte el concejal de Planeamiento, Florentino Delgado, muy contento por el hecho de que comience la redacción del POM«que tanta falta nos hace». En esta línea, recordó que tanto el Ayuntamiento como el equipo redactor del POM tienen «el empeño de enfrentarse a la ciudad más difícil de España».
Al respecto, el concejal de Planeamiento remarcó una vez más las posibilidades de modernización con las que cuenta la ciudad y ahondó en su propuesta de crear vanguardia en algún barrio de Toledo, en referencia a la regeneración de Palomarejos. Sin embargo, recalcó que la modernidad que siempre ha defendido para Toledo busca «la armonía y la belleza», con el objetivo «de que todas las generaciones dejen su huella en la ciudad».
el reto. El arquitecto José María Ezquiaga, buen conocedor de Toledo, para la que ha firmado distintos diagnósticos y documentos, tiene claras las circunstancias especiales de la ciudad y es consciente «de que cualquier cuestión en el Casco es extemadamente sensible». Por tanto, apuntó que el equipo redactor trabajará teniendo en cuenta «el diálogo de la ciudad», sus carencias urbanísticas, los cambios normativos estatales que se avecinan para simplificar y agilizar los planes urbanísticos y pueden influir en el documento «esencial para dar respuesta a los cambios demográficos».
Además, Velázquez está convencido de que el Gobierno regional colaborará con el Ayuntamiento en este reto, dejando atrás modificaciones puntuales «que a esta administración no le gustan».
fases. El equipo redactor realizará el borrador del POM y el documento inicial estrátegico, que se presentarán ante la autoridad ambiental en los próximos ocho meses. Esta fase dará paso a una segunda que se centrará en la redacción de la versión inicial del POM y del Estudio Ambiental Estratégico, con un duración de diez meses.
A continuación, la documentación se llevará a información pública y concertación del POM, fase que finalizará con la aprobación inicial de del plan por parte de Ayuntamiento en una tercera fase, que tiene previsto finalizar si no se produce ninguna incidencia en mayo de 2027. La cuarta fase terminará con la publicación de la aprobación definitiva por la Consejería competente, y cuenta con un periodo de cuatro meses.