La provincia de Toledo se tiñe de naranja estos días inmersa en una situación meteorológica peculiar, donde la calima tiñe el cielo de tonalidades arcillosas.
Este fenómeno, causado por la presencia en la atmósfera de diminutas partículas de polvo, ceniza, arcilla o arena en suspensión, es consecuencia de condiciones atmosféricas particulares que propician su acumulación y dispersión, en este caso se trata de una masa de polvo llegada del Sahara, de África.
Además de la impactante apariencia visual, la calima también trae consigo molestias para la población, especialmente en el sistema respiratorio, «debido a la alta concentración de partículas en el aire», destaca el Dr. Francisco Roig, neumólogo de HM Hospitales.
La calima llena las urgencias y tiñe Toledo de naranja - Foto: Yolanda LanchaEste fenómeno afecta no solo a la provincia de Toledo, sino a toda la península, y tiene efecto directo en nuestras vidas diarias. Un suceso que cada vez será «más frecuente por el cambio climático».
Este polvo del desierto «no solo afecta a las vías aéreas superiores, sino a las más finas, más periféricas. Incluso al alveolo pulmonar». Clave en todo esto, el tamaño de estas partículas, que no deben superar las «cuatro micras, y ya es un tamaño considerable para poder producir problemas a nivel respiratorio. Desde problemas de tos, irritación de las vías superiores, picor de garganta», incluso en personas sanas. Pero es en los ciudadanos con patologías respiratorias crónicas cuando «se incrementan las hospitalizaciones o las asistencias con urgencias».
«Y no es de extrañar que veamos un incremento de infecciones respiratorias en estos días de calima. Porque este polvo en suspensión se puede mantener durante seis días, aunque la ola de calima haya desaparecido», apunta el Dr. Francisco Roig.
La primavera, el aumento de las temperaturas, las alergias... y ahora la calima, hacen una «combinación peligrosa para todas aquellas personas que sufren problemas respiratorios».
Consejos. Frente a la creciente frecuencia de episodios de calima, el Dr. Francisco Roig «aconseja a la población tomar medidas preventivas para evitar la exposición prolongada al polvo en el aire».
«Debemos evitar las prácticas de ejercicio intenso como puede ser salir a correr, en bicicleta... y en el caso de las personas con patologías respiratorias crónicas sí que recomendamos utilizar una mascarilla del tipo FFP2, porque es la que mayor grado de protección ofrece, precisamente por el tamaño microscópico de las partículas», añade el doctor.
Lluvia de sangre. Además del cambio en el color del cielo, uno de los efectos más destacados de este fenómeno es lo que comúnmente se denomina «lluvia de sangre». Aunque pueda sonar alarmante, en realidad es un evento más común de lo que se piensa y es que las lluvias intermitentes de estos días llevan consigo partículas de polvo en suspensión, que al caer, cubren todo con una capa de arena, especialmente afectando a vehículos, calles o monumentos de Toledo.