Arranca una semana clave para el piragüista de Talavera Paco Cubelos, pues los próximos jueves 11 y viernes 12 de abril se celebra el selectivo nacional en el embalse de Pontillón (Pontevedra), donde aspira a que la plaza conseguida para los Juegos Olímpicos de París 2024 para España se convierta en nominal en K1 1.000 metros. Una experiencia que repetiría por tercera vez en su carrera deportiva, ya que representó a España en los Juegos Olímpicos de Londres 2012 y Tokio 2020.
En una entrevista con EFE, el deportista ha expresado que afronta «con ganas este primer gran objetivo del año», aunque ha reconocido que existe presión porque se juega la clasificación. Aun así, ha resaltado que «el trabajo está hecho y bien hecho».
Precisamente, este lunes 8 ha viajado hacia la ciudad gallega donde el jueves, a las 9:30 horas, serán las semifinales del selectivo y a las 11:30 la final, todo ello en la categoría K1 1.000 metros, donde pretende conseguir la plaza.
Por otro lado, el viernes competirá junto a un compañero en la categoría K2 500 metros, y ya ese día se conocerá de forma definitiva si Cubelos ha logrado una de las seis plazas que España consiguió para los Juegos.
De todos modos, el palista ha apostillado que, de no conseguir dicho objetivo este mes de abril, aún «hay otra oportunidad», del 10 al 12 de mayo, en la Copa del Mundo, que se va a celebrar en Hungría. El de Pontillón, ha añadido, es un embalse que, cuando ha estado, siempre le ha gustado, aunque ha reconocido que lleva tiempo sin ir porque las ultimas veces han competido «en otros lugares».
El único condicionante puede ser la meteorología, ya que no le preocupa la falta de agua en el embalse «gracias a las lluvias de estas semanas pasadas», por lo que espera que no haya tormentas ni viento», porque, ha puesto de relieve, están «muy expuestos». De cualquier forma, «son factores con los que hay que contar, que no podemos entrenar y que estén como estén, voy a tener que competir», ha asumido.
Ha reconocido que para los piragüistas «el invierno es duro porque es mucho tiempo sin competir». «Yo porque fui a Sevilla», donde logró su quinto título nacional de K1 5.000, «y abrí boca, pero si no, desde agosto de 2023 con el Campeonato del Mundo, donde logré la plaza para España, en los próximos Juegos Olímpicos hasta hoy, no hubiera competido», ha explicado. «Son muchos meses de parón y en las dos competiciones me juego la vida», ha subrayado.
Por eso pone el foco en la importancia del trabajo base previo a las pruebas deportivas, en realizar un entrenamiento de agua, gimnasio y carrera durante seis u ocho horas. Pero no solo eso, ha incidido, porque «la preparación es de 24 horas, porque el descanso, el fisioterapeuta y la alimentación tienen mucha repercusión».
En estos días previos a los selectivos nacionales «ya bajamos intensidad, son entrenamientos más cortos para quitar la fatiga y llegar descansado» y se comienza «a coger sensaciones de competición», ha apuntado Cubelos.