«Hemos dado un paso, y ahora hay que ir a por más». Rubén Gala no podía ocultar su felicidad por haberse clasificado para los 'playoff' de ascenso a Segunda Federación, según él, después de ganar "en el campo más difícil del grupo ahora mismo, frente al equipo más en forma, junto con nosotros". El entrenador del CD Toledo reconoció la superioridad de su equipo, y piensa que fueron "justos vencedores", así que se alegra "por los jugadores, por el club y por la afición", sobre todo "por el gran trabajo que hay detrás".

El palentino no dejó de destacar esa movilización, con unas 700 personas en la localidad ciudadrealeña, que no dejaron de animar "desde las cuatro y media de la tarde; fue espectacular, nos llevaron en volandas".

Este tercer puesto final en la Liga y el pase a la fase de ascenso permite al Toledo, dice Gala, "empezar de cero". Sigue manteniendo que están "muy fuertes", pero también que "hay que seguir trabajando igual".

Por lo demás, comentó que se ha conseguido el objetivo a pesar de que "nadie creía en nosotros". Asimismo, el preparador verde lanzó un mensaje a los escépticos: "Hemos callado muchas bocas". Y es que, venía sosteniendo que "en el examen final es cuando te tienen que evaluar.

Preguntado por la eliminatoria frente a la UD Socuéllamos, la prevé "muy igualada". Recuerda que en el Paquito Giménez, el día de su debut en el banquillo, salió "un partido duro", mientras que en el Salto del Caballo el rival planteó "un encuentro más defensivo", pero piensa que fueron superiores hasta la expulsión de Abraham.

Piensa algo parecido de la otra eliminatoria, la que jugarán el CD Cazalegas Élite Ébora Formación y el CD Quintanar del Rey, pues "así se ha reflejado en la liga regular". Lo importante para el CD Toledo es que la plantilla llega "muy bien", tras superar meses de muchas lesiones, sobre todo concentradas en enero y febrero. De hecho, Luna ya está disponible, aunque se quedó fuera de la convocatoria en esta última jornada por decisión técnica.

En otro orden de cosas, Rubén Gala indicó que el árbitro no había influido en el encuentro, a pesar de reclamar el Toledo un posible penalti a Unax y el Villarrubia una jugada controvertida en el límite del área. "Fueron valientes y dejaron jugar", explicó.