Tanto retraso con la información sobre el trazado del AVEa Lisboa y tantas presiones de uno y otro lado están causando desazón entre los residentes del toledano barrio de Valparaíso. Se temen que las vías pasen demasiado cerca del barrio y tenga consecuencias medioambientales, pero también de ruido. Así se lo comunicó la Asociación de Vecinos Río Chico al alcalde de la ciudad, Carlos Velázquez, el pasado viernes, en un encuentro en el que repasaron, seis meses después del anterior, la situación del barrio.
Velázquez les explicó que «por lo que conoce acerca del trayecto es que va del lado de Toledo, pero en el límite con Bargas, es decir, por lo que se sabe por ahora, el trayecto se aleja un poquito de Valparaíso unos trescientos metros más», apunta Belén Molina, presidenta vecinal.
Además, durante el encuentro vecinos y primer edil repasaron las cuestiones pendientes de su última reunión y estudiaron el problema de los autobuses. La Asociación agradeció la puesta en marcha de la nueva línea 32 hacia el hospital del Polígono. Pero más allá, va a iniciar una recogida de firmas para solucionar los problemas de entrada y salida de los institutos, que se resumen en que pasan demasiado tarde, con lo que los jóvenes nunca llegan a tiempo a clase, y en ocasiones dejan incluso a usuarios en tierra. El edil Iñaki Jiménez explicó que ya conoce el problema, porque así se lo ha comunicado Unauto. De ahí que se hayan puesto en marcha vehículos de refuerzo, que estudia ampliar para encontrar una solución.
Seis meses después. Seis meses después de su último encuentro, Velázquez explicó a los vecinos que por fin se ha retirado la pista de skate, cuestión que la Asociación llevaba reclamando años. También se han reparado las canastas de las multipistas. Finalmente, el Ayuntamiento de Bargas también ha arreglado por fin el colector estropeado del arroyo Salchicha, que provocaba malos olores.
Además, el primer edil explicó que Valparaíso ha sido el primer barrio en el que agentes de la Policía Local están controlando de paisano a los propietarios que no recogen los excrementos caninos. A la Asociación le consta que ya ha habido algunos a los que les ha llegado la sanción.
Pendiente queda el arreglo de la cubierta del centro cívico. Lo que ha hecho el Ayuntamiento es reclamar al seguro de la última reparación, para que arregle las cubiertas dentro de la garantía y se acaben las goteras.
Igualmente, los vecinos trasladaron que hay que mejorar la limpieza de aceras y parques. Hay mejoras pendientes en el campo de fútbol y que replantar alcorques vacíos. Finalmente, habrá que terminar de acondicionar la mediana de la avenida del Madroño en su último tramo.